En su comunicado a la opinión pública, el ciudadano alemán sostuvo que los 11 meses que transcurrieron desde la desaparición de la menor en Emboscada han sido los más difíciles de su vida.
Aseguró que ha sido acusado injustamente, o que le causó mucha decepción, además de la pérdida de su libertad.
Explicó que si decidió no hablar fue porque sus abogados se lo recomendaron, y porque creyó que la justicia paraguaya sería justa, pero finalmente comprobó que no es así, dijo.
“Su parte de la verdad”
Lamentó que jueces y fiscales “pisoteen la ley”, por lo que decidió contar “su parte de la verdad”. No obstante aclaró que él tampoco conoce toda la verdad del caso.
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Relató que siempre tuvo una buena relación con la niña, y que no cometió ningún abuso ni secuestro hacia ella, así como tampoco la maltrató. “No he matado a nadie ni tenido conocimiento de ningún acto de este tipo. Desde que la vi por última vez en monte Pacará el día de su desaparición, no tengo conocimiento de su paradero hasta el día de hoy. En el momento de la desaparición yo no estaba en el lugar”, expresó textualmente Reiner en su comunicado.
Agregó que no se considera el padrastro de la niña, que tampoco la adoptó y no tiene derechos parentales sobre ella. Recordó que la conoce desde un año y medio antes de la desaparición y que solo en las últimas cuatro semanas antes del hecho la niña vivió en su casa, junto con su madre y su hermana.
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Negó tener pornografía infantil
Aseveró que en su vida vio “una sola foto de pornografía infantil”, y que tampoco las ha tomado, poseído ni las ha hecho circular. Resaltó que la Fiscalía miente al decir que se encontraron 80.000 fotografías de contenido pornográfico en su celular, y aseguró que solo se hallaron “dos fotos normales”.
Citó que a su pareja Lilian y a él se los acusa de desacato a una orden judicial por negarse a dar una muestra de su cuerpo que pudiera ser usada en contra de ambos, pero justificó esa negativa diciendo que solo hicieron uso “de un derecho humano sin embargo los fiscales y jueces lo consideraron un hecho punible”, lamentó.
Relató que vino a Paraguay porque tenía el sueño de emigrar a un país de Sudamérica, y que eligió este país porque las condiciones para los inversores parecían ser las mejores.
Relató que se mudó a Paraguay en junio del 2018, y que se separó porque su primera esposa no se decidió a venir con él.
El inicio del noviazgo
Conoció a Lilian Zapata en el departamento que alquiló en un complejo residencial, y que aunque esta tenía esposo, este se había mudado, por lo que con el paso del tiempo comenzaron a frecuentarse.
Allí, recordó, que la mujer le relató sobre su difícil vida, pues su marido le había abandonado y no cumplía con los pagos de la manutención, además de que tenía a una niña con discapacidad.
Posteriormente la madre y sus hijas se mudaron a un departamento cerca de Emboscada y puso negocios que no funcionaron. Posteriormente empezó a apoyarla aunque en forma limitada, cuenta.
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Recuerda que solía invitar a la señora y a las niñas a cenar a su casa y que enseñaba ejercicios de lenguaje a la niña.
Recordó que continuando su proyecto se mudo a su casa en Monte Pacará y ofreció a Lilian y a sus hojas vivir con él en su casa justo cuando empezó la cuarentena sanitaria. Recordó que esas primeras cuatro semanas fueron muy armoniosas para la familia, y que las niñas jugaban en la naturaleza.
Destacó que la niña comenzó a ser más independiente, pero que el “idilio” terminó abruptamente el día que la pequeña desapareció.
Su opinión sobre la desaparición
Afirmó que solo puede dar su opinión, porque desconoce lo que pasó. Cree que alguien pudo haber accedido desde la zona del arroyo y se coló a la casa o vino desde la propiedad vecina. Estima que cualquier hombre adulto pudo haber esperado el momento oportuno para llevarse a la pequeña rápidamente.
Considera también que pudieran estar implicados uno de los trabajadores y el vecino, pues ambos mostraron un comportamiento muy raro ese día.
Relató que desde que volvió a monte Pacará y Lilian le informó de la desaparición de la niña, iniciaron inmediatamente la búsqueda.
En cuanto al motivo por el cual no llamó a la Policía, dijo que fue porque se propusieron hacer ellos la búsqueda intensa y encontrar a la niña antes de que oscureciera. Argumentó que si él hubiera sido el culpable, hubiera llamado a la policía cuanto antes para no llamar la atención, por lo que el argumento le parece insuficiente.
Culpa al crimen organizado
Para el alemán, esto se trata de un caso de “crimen organizado cuyos autores son encubiertos por la fiscalía y la policía”.
Dijo que esa le parece la única explicación para que, pese a las numerosas pistas, indicios y sospechas que enviaron a los investigadores “hayan quedado aparentemente desatendidas y solo haya un sospechoso”.
Expresó que le parece relevante “observar quién no fue allanado”. Resaltó que Lilian es una madre que está sufriendo, pues luego del abandono de su esposo, desapareció su hija y la separaron de su hija mayor, además de apresarla.
Repudió que a la mujer la hayan “pisoteado” sin conocer la verdadera historia.
“Me convertí en un pedófilo”
Lamentó que siendo “un inversor intachable, sin antecedentes penales, me convertí en un padrastro pedófilo que manipuló a su novia y secuestró a su hija”. “Ni siquiera buscamos otros posibles autores, porque ya han encontrado un culpable. Lo único que faltan son evidencias, pero como eso no sucedió en el plazo de prisión preventivas, ya se les ocurrirá algo nuevo para mentenerme en prisión”, criticó.
Reclamó que su nombre completo se haya publicado desde el principio, aunque no se haya confirmado su culpabilidad.
Apuntó acusaciones fuertes contra Rufino Zapata, abuelo de la menor, de quien dijo que azuzó a los medios contra su hija y contra él. Recordó que le pedía a Lilian que declare contra él, aunque no fuera cierto.
Duras acusaciones al abuelo
Señaló que le llama la atención el comportamiento del abuelo, y lo acusó de tendencias pedófilas, “pues vendió a su propia hija a un compañero a la edad de 7 años”. “¿Qué motivación tiene un padre que no se ha ocupado de su hija para meterla ahora en la cárcel? ¿Juega un papel en el secuestro?”, sugirió Reiner
En cuanto al padre biológico de la menor, Stephan, también afirmó que le llama la atención que el hombre haya abandonado a las tres en Paraguay, y que solo cuando le confirmó que hay un nuevo hombre en su vida, se alarmó y reactivó el contacto con su suegro Rufino para “idear cómo separar” a la nueva pareja, afirmó Reiner.
Sugirió que a pesar de todas las expresiones de amor de Stephan por su hija, le llama la atención que este padre ha evitado venir a Paraguay a ayudar en la búsqueda de su hija. “¿Será que tiene miedo de declarar ante las autoridades?”, se preguntó Reiner.
Sugirió que hay “financiadores”
Además se refirió a financiadores de una campaña dirigida contra su persona, y sugirió que costean las pancartas y el traslado de los manifestantes. Argumentó que en Paraguay “desaparecen muchos niños al año, pero que sólo este caso tiene tanta cobertura mediática extrema”.
Se preguntó qué credibilidad puede tener un pedido de justicia “por parte de personas que condenan a otras personas sin conocimiento”. “¿No debería aplicarse esta justicia para los detenidos inocentes?”, preguntó.
Cuestionó que la información sea “parcial y nadie parece estar interesado en la verdad”. Preguntó a la prensa qué beneficio podría ganar él haciendo desaparecer a la niña. Aseveró que las sospechas son “absurdas” y no encajan con su vida.
Enfatizó que en todo caso sería “disparatado” que eligiera su propiedad para cometer un crimen, pues así echaría por tierra todo su esfuerzo e inversión en el proyecto de su casa.
Habla de campaña en su contra
Señaló que tiene claro que “el objetivo principal era quitarme del medio”. “No me hicieron una sola pregunta sobre la niña, me preguntaron sobre mis inversiones, no se trataba de la niña, desde el principio se trató de mi proyecto”, alegó.
Reiner sospecha que quizás alguien tenga como objetivo el mismo proyecto de condominio que él estaba emprendiendo, y se sintiera amenazado por su éxito, por lo que desee arrebatarle el terreno, que es “muy deseable”, dijo.
Afirmó que a la fecha, ellos creen que la niña “sigue viva” y que no pierde las esperanzas de que viva. Por lo tanto, pidió al pueblo paraguayo que los ayude en la búsqueda.
Ofreció recompensa por datos de la niña
Anunció que para acabar con el sufrimiento, decidió de motu proprio ofrece una recompensa por pistas que lleven con éxito a la niña. Ofrece G. 350 millones para quien tenga información sobre el paradero de la menor.
Habilitó el número de sus abogados en el extranjero, el 506 63001919 (Whatsapp) para que las personas puedan enviar las pistas.
“Si se recibe más de una pista, la recompensa se dividirá en consecuencia. Si hay igualdad de pistas, se premiará al que llegue primero. La recompensa se pagará solo por pistas reportadas pro este número. No se pagará recompensa a miembros de la Policía y la Fiscalía, ni a sus parientes. El número está habilitado a partir de mediodía de esta fecha”, especificó Reiner en su comunicado, que fue leído integramente por su abogado defensor, Max Narváez.