El Ministerio Público dispuso ayer la conformación de un equipo de siete agentes fiscales que se encargará de investigar el sangriento amotinamiento sucedido en la cárcel de Tacumbú y la muerte de al menos siete reclusos. Está integrado por Giovanni Grisetti, Federico Delfino, Alicia Sapriza, Marcelo Pecci, Lorenzo Lezcano, Santiago González Bibolini, y la directora de Derechos Humanos, Karilem Doldán.
La investigación se centrará especialmente en la localización del túnel cavado como parte del supuesto plan de fuga de Orlando Efrén Benítez Portillo y de Armando Rotela, este último líder de la banda clan Rotela.
Ante la imposibilidad de ingresar al sector manejado por aquel grupo criminal para intentar localizar el acceso al túnel –por la tensión existente–, los investigadores buscarán hallar el punto de salida en un barranco próximo al reclusorio.
La fuga masiva, conforme a los datos que manejan los investigadores, debía consumarse en ocho días.
Séptimo fallecido
El Ministerio de Justicia confirmó ayer el hallazgo de un séptimo recluso asesinado durante el motín. Se trata de Francisco Vargas Leiva (43), quien estaba preso por hurto agravado ocurrido en 2019.
La institución también actualizó la nómina de los seis reclusos ultimados el martes en la revuelta. Son: Alcides Ramón González González (26), Roberto Ríos (54), Julio César Shareamm Barrios (31), Carlos Raúl Casco Rojas (25), Fernando Ortiz Echeverría (26) y Julio César González Cáceres (40). Los tres últimos mencionados fueron decapitados.
Néstor Pereira, uno de los guardiacárceles tomados de rehén por los convictos amotinados, dijo que fueron amenazados de muerte, aunque reconoció que los trataron “bien”. Enfatizó que la dirección de la cárcel debe estar a cargo de alguien que conozca el manejo interno.
“Nos agarraron dentro del pabellón y nos llevaron a meternos en una celda. Nos protegieron, pero en una parte nos dijeron que nos iban a matar a todos si entraba la policía. En todo momento nos cuidaron bien”, dijo Pereira a ABC TV.
“Tiene que ser un cambio –de alguien– que sepa dominar esta institución, no es para que venga un político. Nosotros no cuidamos a gente que viene del jardín, hay muchos delincuentes pesados. Cuidamos internos muy peligrosos, tenemos que estar preparados”, declaró.