El Prof. Dr. Erik Marcelo Ledesma Solís, máster en Nutrición Humana y médico Nutriólogo en el Instituto Nacional del Cáncer (INCAN) y en el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN), afirma que consumir diariamente agua potable es de vital importancia porque cumple funciones indispensables en el organismo tales como transportar sustancias nutritivas, eliminar las sustancias tóxicas del organismo a través del sudor, orina y heces, y ayuda a mantener y regular la temperatura del cuerpo.
“El agua es la base de los líquidos corporales, pues constituye más de las dos terceras partes del peso del cuerpo humano. Las pérdidas naturales de agua en el organismo van de 2 a 2,5 litros diarios aproximadamente y esto puede aumentar según la actividad física realizada, el clima y la temperatura ambiente. Se recomienda consumir en promedio como mínimo 8 a 10 vasos de agua potable (1 vaso = 250 ml), o bien 2 a 2,5 litros de agua por día”.
Altas temperaturas
Marcelo Ledesma dice que en las temporadas de mucho calor, es decir en verano, o cuando se realiza actividad física el consumo de agua debe ser aumentado, ya que existe mayor pérdida corporal de líquido. “Si no nos hidratamos bien, la temperatura del cuerpo aumenta y produce síntomas como sequedad de labios y boca, pocas ganas de orinar, apatía y cansancio. Cuando sentimos sed se calcula que nuestro cuerpo ya ha perdido 1% de líquido que se necesita para vivir, entonces la sed ya es una señal de alerta de que el proceso de deshidratación ya ha empezado. Por tanto, no se debe esperar a tener sed para tomar agua, ya que la sed significa que ya estamos deshidratados”.
El agua y los deportes
“La hidratación es uno de los pilares fundamentales para el buen rendimiento físico del deportista. La hidratación debe darse antes, durante y después de cada actividad deportiva, ya sea en el entrenamiento o la competición. Existen numerosas bebidas hidratantes para deportistas que están disponibles en el mercado; el agua por sí sola no logra la hidratación del deportista, ya que las pérdidas de sales minerales y electrolitos son abundantes. La rehidratación solo se consigue a través de bebidas hidratantes y diseñadas específicamente para la actividad deportiva. Las necesidades hídricas y de hidratación en el deportista dependen del tipo de deporte que se practica”, comenta el máster en Nutrición Humana.
Diferencia: agua mineral o embotellada y el agua potable de la proveedora estatal
“El agua potable es aquella que para su consumo debe estar libre de gérmenes, parásitos y sustancias tóxicas. El agua proveída por el Estado y aquellas que se comercializan envasadas deberían cumplir con las características que definen al agua potable; entonces, en términos de potabilidad, no debería existir ninguna diferencia. Ahora bien, el agua mineral natural según la Norma Codex se diferencia claramente del agua potable normal por su contenido de determinadas sales minerales y las cantidades de dichas sales en relación al agua potable, así como por la presencia de oligoelementos”.