La firma San Agustín, que poseía la propiedad del inmueble, fue ligada al exsenador Jorge Oviedo Matto y la información que se manejaba es que un hombre de su confianza, Arnaldo Jara, era el administrador.
La compra firmada por el entonces presidente del Indert Luis Ortigoza fue avalada por Emmanuel Friedmann, del Ministerio de Hacienda; Justo Gamarra, representante de las municipalidades, y Milciades Duré, encargado de las gobernaciones, todos miembros de la Junta Asesora.
En el caso de Friedmann, también un exparlasuriano, fue condenado por el juez de garantía Raúl Florentín, en juicio abreviado, a dos años de cárcel con suspensión de la condena por el juicio, tras admitir los hechos. Además se vio obligado a reparar económicamente.
En el caso de Jara fue beneficiado con la suspensión condicional del procedimiento, tras la admisión de los hechos.
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