La víctima, identificada como Ariel Gustavo Leiva Bogado, estaba con su novia en la casa de la madre de ésta. Minutos antes habían salido a la vereda para meter una moto, pero ella se sintió mal y permanecieron sentados en el cantero.
Fue en ese momento que aparecieron dos hombres a bordo de una motocicleta. El que estaba atrás descendió con un arma de fuego en mano y pidió el celular de Ariel Gustavo. Este se lo entregó, aparentemente sin resistencia, y luego el victimario gatilló su arma una vez, sin que la bala saliera, y volvió a hacerlo, esta vez con un tiro que ingresó en el lado derecho del cuello de la víctima.
Los vecinos auxiliaron al herido y lo llevaron en un vehículo particular hasta el Hospital Distrital de Ñemby, adonde llegó sin signos de vida. El doctor Alain Otazú constató que la herida de bala tenía orificio de entrada sin salida.
Las autoridades, por protocolo del COVID-19, llevaron el cuerpo a la morgue judicial, donde se extraerá la bala, se aguardará 24 horas y después será entregado a los familiares.
La fiscala Laura Guillén determinó que fue “un robo con resultado de muerte de Ariel Gustavo Leiva Bogado. El criminal, según la novia, es un joven alto, moreno, con remera de color oscuro y un jean. Estaban sin tapabocas”.
Efectivos policiales de Criminalística y de Homicidios empezaron a trabajar reuniendo indicios para identificar a las personas que acabaron con esta joven vida en la cuadra donde se perpetró el hecho y por donde se fugaron. Golpearon casa por casa para conseguir las imágenes de cámaras en las cercanías, lo que será fundamental para identificar a los criminales.
Intervinieron la Dirección de Investigación Criminal de Hechos Punibles del Departamento de Investigación de Hechos Punibles y el sistema radial “Base tres”, a cargo del subcomisario PS. Hugo Velázquez, acompañado por personal de turno. La investigación del caso está en curso.