Agrega que, posteriormente, a medida que se avizoraba la “nueva normalidad” y se aprendía a convivir con la pandemia se avanzaba hacia una segura recuperación y se volvió a repuntar los números. El sector tuvo que afrontar también la sequía, que puso mucha presión en los animales del campo; la bajante de río, los cortes de rutas en países vecino como Argentina, entre otros, pero felizmente las buenas relaciones con la Cancillería permitieron una rápida solución a esta penosa situación.
El gremio de frigoríficos destaca el apoyo de Taiwán al Paraguay, que eliminó los cupos para enviar carne fresca y congelada, así como también permitió el envío de carne fresca por avión. Otro logro que celebra es que se excluyeron los aranceles para menudencias y hamburguesas por parte de Taiwán y la habilitación de Uruguay para la exportación de carne de cerdo. Igualmente, resaltó el trabajo del Senacsa y la Cancillería para que los rabinos pudieran ingresar para la faena kosher. Agrega, que se empezó a gestionar en la habilitación de EE.UU y adelantar las gestiones de la documentación, para empezar los procesos de apertura de países del sudeste asiático.