La culpabilidad, por mayoría, es por uno de los tres casos y donde ya se comprobó que Óscar González Daher, Raúl Fernández Lippmann y Carmelo Caballero incurrieron en tráfico de influencias y asociación criminal en el caso Electrofácil. El presidente del Tribunal, Juan Carlos Zárate, votó en minoría por la absolución.
“Sopesando todas las pruebas testimoniales y documentales que han ingresado en el transcurso del debate oral y público, se ha destruido el estado constitucional de inocencia que gozaban Raúl Fernández Lippmann, Óscar González Daher y Carmelo José Caballero Benítez”, afirmó la jueza María Fernanda García de Zúñiga, que votó en mayoría por la condena junto a su colega Héctor Capurro.
Zárate no solo justificó su voto en disidencia, argumentando la prevalescencia del derecho a la intimidad y a la inviolabilidad de las conversaciones, sino también amenazó a los fiscales del caso diciendo son pasibles de un proceso ante del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) por mal desempeño en sus funciones.
El mismo sostuvo que supuestamente, al considerar ilegales las pruebas iniciales de los audios, que realmente no se estudiaron en el juicio, las demás también son ilícitas. Dijo que su criterio, la Constitución establece que “no se pueden valorar escuchas telefónicas por técnicas ilegalmente. Eso es denominado el árbol envenenado. Esa prueba directa y todo lo que derive de él o prueba indirecta, son los frutos (del árbol envenenado)”.
Los miembros del tribunal, en mayoría, dieron valor a las declaraciones de los testigos, que relataron cómo habían sido presionados por los ahora culpados. Estos testimonios reemplazaron a los audios filtrados, pues estos fueron excluidos como prueba por parte de la Fiscalía pues fueron obtenidos sin orden judicial.
Aún no se dio a conocer los años de condena.
Como antecedentes también hay que recordar que González Daher fue el primer legislador en ser echado del Congreso por corrupción, por este escándalo y por otra imputación por enriquecimiento ilícito, declaración falsa y lavado de dinero. En su segundo periodo se vio obligado a renunciar tras la presión ciudadana.
Caso retroexcavadora
En cuanto al caso retroexcavadora, el juez Héctor Capurro señaló que Óscar González Daher y Fernández Lippmann fueron absueltos por falta de pruebas en contra de estos.
Según la Fiscalía, OGD incurrió en tráfico de influencia es en la de la retroexcavadora de la firma El Farol, que era solicitada por Walberto Zárate, exintendente de la ciudad de Mariano Roque Alonso varias veces denunciado.
El entonces presidente del Jurado llamó a la jueza de Ybycuí, Adriana Pedretti, a pedirle que entregue dicha maquinaria.