Hay dudas de quién atacó en estancia

PEDRO JUAN CABALLERO (Gilberto Ruiz Díaz, corresponsal). Sonia González Hetter, propietaria de la estancia “San Marcos 2” de Capitán Bado, cree que el ataque ocurrido el miércoles último en ese inmueble, que derivó en la muerte de un agente policial del Grupo Especial de Operaciones (GEO) y en el que otro resultó gravemente herido, pudo haber partido de cualquier lado. Aunque reconoció que el mayor de los problemas lo son los abigeos, dijo que también hay inconvenientes con narcotraficantes e incluso grupos armados.

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“No tenemos evidencias para apuntar a ninguno de los sectores”, afirmó González Hetter.

“Nosotros creemos que los autores de los disparos fueron abigeos de la zona porque siempre hemos tenido problemas de esa índole, pero tampoco tenemos certeza”, señaló la dueña del establecimiento.

Agregó que en esa zona existen muchos problemas relacionados con las actividades ilícitas con el abigeato y el narcotráfico, entre otros.

Respecto a la versión dada inicialmente por algunas autoridades policiales, de que el hecho podría tener relación con familiares de Gerardo Ramón Sánchez, alias “Kela’i”, quien actualmente se encuentra privado de libertad, descartó esa posibilidad alegando que no existe ninguna evidencia que apunte hacia ese sector.

González Hetter contó además que a causa de la inseguridad han pensado en vender la hacienda e ir a vivir en una zona menos conflictiva. La mujer es la viuda del antiguo propietario de la estancia, Aguinaldo Correia Lemes, quien fue asesinado el 18 de julio de 2019 en la ciudad de Capitán Bado.

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