Héroes y ángeles de carne y hueso

Habitan entre nosotros y salvan vidas como parte de su trabajo. Los médicos que atienden en los hospitales hacen lo posible por devolverle la salud a la población y este año pasaron de la epidemia del dengue a la lucha contra el desconocido COVID. No hay palabras para describir su entrega y sacrificio. A modo de homenaje queremos decirles: “Muchas gracias y feliz Día del Médico”.

La entrega de los médicos fue titánica: primero enfrentaron la epidemia del dengue y luego arreció el COVID-19.Go Nakamura
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La Dra. Estela Torres de Taboada, presidenta de la Sociedad Paraguaya de Medicina Interna, explicó que este fue un año muy duro para todos: para el país, para el mundo, para los médicos, porque el personal de salud está más directamente expuesto a pacientes del COVID.

Esta foto es una de las que más aprecia la doctora Estela Torres de Taboada.

“Fue un cambio muy radical, desde diciembre que empezó la gran epidemia de dengue, ya el sistema de salud tuvo que trabajar intensamente para dar respuesta al dengue. Y el 7 de marzo, a partir del primer caso de coronavirus, y el 14 de marzo con la cuarentena total, que nos encerramos en las casas. Los hospitales trabajaron por cuadrillas, todo el país trabajó de un modo diferente”, recordó.

Médicos fallecidos a causa del Covid.

El personal apto que no estaba enfermo trabajó en el hospital y el personal con riesgo permaneció en su casa, según refirió la representante médica.

Hospital de contingencia

La Dra. Torres de Taboada es también directora médica en el Hospital Nacional de Itauguá, el hospital polivalente más grande de todo el sistema de salud público, de cuarto nivel de atención, lo que quiere decir que está preparado para atender patologías complejas. “Somos hospital de referencia, nos vienen pacientes de todo el país, el 25 de abril nos entregaron el hospital modular con 120 camas preparadas para pacientes con COVID. El primer paciente que ingresó con el virus lo hizo el 27 de mayo, fue el primer paciente que ingresó a terapia intensiva, el sistema entonces ya estaba preparado”, destacó.

Datos comparativos de las cifras del monitoreo del personal de blanco con exposición al covid, aportados por el doctor Guillermo Sequera.

Bien protegidos

Según la presidenta de la Sociedad Paraguaya de Medicina Interna, en este hospital “tuvimos los equipos de protección individual, al inicio con un control más estricto para una distribución razonable porque había y hay mucho temor; meses atrás se le conocía menos al virus. Ahora tenemos evidencia fuerte de cómo se transmite y el personal sabe cómo protegerse”.

Añadió que “en ningún momento faltó el equipo de protección; sí se insiste en que se use en forma razonable, porque puede acabar como pasó en el mundo, algo que hizo colapsar el sistema de salud en China, Europa, y Estados Unidos”.

Un total de 280 funcionarios con COVID

Con todos los cuidados, el personal de salud del hospital fue alcanzado por el contagio del COVID. “Personal salud y administrativo en un total de 280 afectados y, lamentablemente, cuatro defunciones. Curiosamente, según los estudios y análisis efectuados, sabemos que el 95% se contagió porque rompió las normas de bioseguridad en su casa y en su comunidad. Hubo relajación en cuanto al uso de tapabocas, lavado frecuente de manos y distancia social”, aseguró.

Los médicos no olvidan a sus siete colegas fallecidos por covid en nuestro país. Lo hicieron de manera simbólica frente al ministerio de Salud.

Vale un ejemplo para atestiguar lo dicho, y es que los médicos se contagiaron en una reunión social, según afirmó la directora médica.

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Esto continúa

“No bajemos la guardia, esto continúa, no sabemos cuánto tiempo. Si bien los números de contagios pueden bajar, eso no quiere decir que hay que disminuir la protección. Debemos seguir con el uso de tapabocas, lavarnos las manos y mantener la distancia social. A los colegas les animo a que sigamos adelante, podemos seguir aportando para dar a nuestros compatriotas atención de calidez y calidad. Les aliento a seguir cumpliendo al personal médico y paramédico, que trabajemos como equipo, y si bien no podemos tener un resultado óptimo, hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para que nuestros pacientes se sientan asistidos con calidad y calidez”.

Finalmente, agradeció a su esposo y toda su familia porque en todo este tiempo la sostuvieron.

Héroes y ángeles que habitan entre nosotros y sin descanso nos cuidan y defienden en plena pandemia de COVID. ¡Muchas gracias!

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