“Nuestros últimos entrenadores son gente que estuvieron en los Pumas y la relación es muy cercana. Es un momento muy triste. Se mezclan las cosas. En cualquier punto del mundo, lo primero que se le enseña a los chicos en el Rugby son los valores del juego, eso es universal”, manifestó Mendoza.
En cuanto a las características del deporte, mencionó: “Es un deporte rígido, con sus reglas, en un mundo tan grande, se comete errores. Más allá de que sea un exabrupto de un chico de 18 años, rechazamos profundamente y más si es contra nuestros compatriotas. Rechazamos la xenofobia, el racismo”, afirmó.
“Hay que tener en cuenta que eso se dio hace ocho años y se está pagando ahora en un pedestal muy alto”, añadió.
Consultado acerca de si piensa que la amonestación fue muy dura, respondió: “Sí y no. Como formador, afirmo que la xenofobia no está bien. El capitán en el rugby es mucho más, es un líder, un comandante. Sí, porque está mal cualquier tipo de muestra de xenofobia y No porque tal vez lo hizo de niño, con errores. El deporte también pudo haber influido en él y hoy es otra persona”, sostuvo.
En cuanto al rugby paraguayo y la posible “diferencia” social que se pudiera hacer dentro del deporte, Mendoza, dijo que no existe tal diferencia. “Luque es el primer equipo del interior que logró títulos en el rugby, tenemos 44 equipos. El rugby dejó de ser de Elite como la gente consideraba y los valores se siguen cuidando. Es un deporte de contacto, de fricción, sin disciplina sería un deporte de bárbaros”, dijo.
Mencionó que actualmente hay paraguayos jugando rugby en Buenos Aires, en primera división, en España, Francia, varios jugadores en ligas no mayores, también en Uruguay.