Hugo González Chirico, principal dirigente de la cooperativa, señaló que la liquidación de Cootrapar tiene el objetivo de expropiar la reserva ecológica Sagrado Corazón de Jesús (que tiene un precio de US$ 20 millones) y ocultar del lavado de dinero robado de Acepar SA.
“La ciudadanía, incluido los denunciantes del vaciamiento de Acepar, va pagar de sus impuestos el valor del terreno expropiado. Y todo porque el diputado Basilio Bachi Núñez y su colega Henry Mineur pretenden saciar su ego de venganza contra los denunciantes del Vaciamiento de Acepar SA. Esto evidencia, ambos tratan de borrar los vestigios qué ellos también ensuciaron sus manos en Acepar SA”, expresó González Chirico.
Cootrapar participó desde el principio, en 1997, en la privatización de Acepar como parte del Consorcio Siderúrgico Paraguayo (Sidepar), con el 33,3% de las acciones, mientras que el 66,6% quedó en manos de sus socios de la firma Cerro Lorito, presidida al inicio por el Ing. Guillermo Stanley y el Arq. Juan C. Canese. En 2004 estos vendieron su parte al ítalo-argentino Sergio Tasselli, quien en abril de 2013 transfirió sus derechos a la paraguaya Insidsa. Esta no pudo hacer mucho pues el Estado pidió y obtuvo a finales de ese año la intervención judicial de la siderúrgica. En 2017, la Incoop canceló la autorización para que Cootrapar opere como cooperativa y se iniciaron los trámites para su liquidación.
Sobre el tema de la liquidación, Pedro Loblein, titular de la Incoop señaló ayer a ABC que “ya el año pasado conformaron una comisión liquidadora” y, que, “a partir de allí queda en poder de ellos toda la gestión, hay un representante del Incoop en la comisión”. Sin embargo, no quiso dar mayores detalles sobre el avance. González Chirico, por su parte, dijo que desconocen a los integrantes de esta comisión liquidadora.