El juicio oral y público en contra del exsenador Óscar González Daher, Carmelo Caballero, Raúl Fernández Lippmann y Jorge Oviedo Matto prosiguió ayer con dos declaraciones y se extendió hasta la noche con la declaración testimonial.
Ambos testigos indicaron que el trasfondo del caso es un hecho ocurrido en diciembre de 2016, cuando la fiscala Casse Giménez imputó a un barrabrava del Olimpia, identificado como Fernando Rubén Ayala (24 años) y pidió su prisión preventiva por el robo de un celular.
La agente fiscal relató que luego de la imputación se enteró, a través del padre del referido joven y el abogado Leonardo Garófalo, que Ayala estaba de viaje en Costa Rica junto a su compañero y amigo Alejandro Díaz Morínigo, hijo de Javier Díaz Verón, entonces fiscal general del Estado.
Tras conocer esto, la fiscala Casse Giménez ordenó la detención de Ayala.
Casse Giménez fue bastante cuestionada porque la víctima del hecho de robo era hermano de su asistente fiscal, Fermín Bogado. Pese a esto se mantuvo en el caso y no levantó la orden de detención de Ayala, como le habían solicitado.
Días después la agente del Ministerio Público salió de reposo por un problema de salud y su colega Karina Giménez intervino en el caso de Fernando Ayala, sin estar asignada a la causa.
La agente pidió rectificar la imputación para que el procesado sea beneficiado con medidas alternativas a la prisión. Esto permitió a Ayala retornar al país sin problemas.
Según lo relatado por los testigos en el juicio oral, a raíz de este hecho los padres de la víctima presentaron una denuncia, en contra de la fiscala Karina Giménez, ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, por mal desempeño en sus funciones.
En ese contexto, la fiscala Casse Giménez declaró que buscó al entonces senador Jorge Oviedo Matto para que de trámite al enjuiciamiento que el pleno del JEM había aprobado para Karina Giménez.
La fiscala explicó que el secretario Raúl Fernández atajaba la ejecución del enjuiciamiento.
Oviedo, entonces integrante del JEM, la convocó para una reunión, en su escribanía, el 2 de agosto de 2017. El exparlamentario le dijo a Casse que si realmente actuó tan mal, su colega Karina Giménez iba a ser sancionada.
“Me dijo que eso iba a tener un costo, entonces le pregunté de cuánto estábamos hablando, a lo que me respondió: ’10.000 dólares’, yo le miré sorprendida por el monto y me dijo ‘tranquila, con 5.000 ya podemos solucionar esto’, entonces yo le dije que solo si hacía préstamo del banco iba a tener esa suma”, declaró la fiscala ante el tribunal.
Casse agregó que fue en este contexto que a fines de octubre de 2017 Oviedo Matto le hizo llegar una nota de voz, según lo que dijo a través de Rodney Aseretto, quien fue su secretario por mucho tiempo y que murió el año pasado a causa de un cáncer. Indicó que ella a su vez envió la grabación al abogado Diego Tuma.
En ese audio se escucha a Oviedo Matto diciendo: “Casse, amanecé mañana en el banco Casse, yo te voy a solucionar eso. Anína ejepy’apýti”.
Casse Giménez aclaró que no fue ella quien proveyó el audio a ABC y sollozando afirmó que llegó a sufrir amenazas de muerte a raíz de la divulgación del material. “Me ha costado caro decir la verdad, me costó mi matrimonio, se referían a mí diciendo que era la amante de Fermín Bogado”, resaltó.
Un solo audio como prueba
La defensa del exsenador Jorge Oviedo Matto produjo ayer el único audio ofrecido como prueba en este juicio oral por el caso conocido como los “audios filtrados”.
La grabación que fue reproducida es de la entrevista que hizo la periodista de ABC Mabel Rehnfeldt a la fiscal Casse Giménez quien escuchó al aire el audio filtrado en el que Oviedo Matto le pide que amanezca en el banco y que él iba a solucionar el caso.
La defensa también reprodujo el vídeo de una entrevista que tuvo Casse Giménez en el canal televisivo Noticias Paraguay con el periodista Benjamín Fernández Bogado.