En una de las imágenes compartidas por las fuerzas de seguridad tras el último operativo en el que fueron abatidos tres miembros del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), entre ellos el conocido Lucio Silva, se pudo observar los equipos y herramientas que los componentes de este grupo criminal utilizan para operar en el monte. Una botella de agua, otra de miel, una radio a pilas con un cable extenso que funciona como antena y una suela de calzado con forma de raqueta que es empleada por uno de los sujetos para borrar las huellas que dejan las botas, entre otras cosas, son los instrumentos encontrados en una mochila camuflada que pertenece al EPP.
Lea más: CODI descabeza célula del EPP que secuestró a O. Denis
El usuario de Twitter “Hans Lindstrom”, quien se identifica como uno de los sobrinos de Luis Lindstron, el ganadero asesinado por el EPP, compartió esta imagen en su cuenta personal de esta red social calificándola como la “más fuerte de todas” en comparación con las fotografías en que se veían abatidos y aprovechó para relatar en un hilo en Twitter “lo que ve y recuerda una víctima de secuestro por el resto de su vida”. Su tío Luis fue el protagonista de lo que reveló.
“Hans Lindstrom” empezó diciendo que el ganadero le había contado que todos los que se aventuraban en los montes con el EPP, ya sea por decisión propia o por sometimiento, debían cargar una mochila con algunos elementos necesarios. Luis Lindstron aseguraba que era tratado como el sirviente del grupo que lo tenía secuestrado, ya que su carga era la más pesada y contaba con todos los elementos del campamento; también indicó que caminaban durante las noches hasta al amanecer.
La radio a pilas funciona como campana para este grupo criminal. La antena hecha de un cable extenso era lanzada a un árbol bien alto para agarrar señal y así escuchar las noticias del día. “Sabíamos por la prensa lo que hacía la Policía”, comentaba el ganadero a su sobrino.
Si se hallaban cerca de una población “comían bien”: pollo e incluso gaseosas. Sin embargo, cuando se adentraban en lo más profundo del bosque solo ingerían una cucharada de miel a la mañana y otra para la cena. Lindstron contaba que le suministraban una sola botella de agua y que con esa se tenía que manejar, pues a los miembros del EPP no les gusta ir en busca del líquido.
Cuando el ganadero y sus secuestradores tenían que cruzar por un camino, uno de los miembros del EPP daba los primeros movimientos y los que venían detrás tenían que pisar sobre la huella que iba dejando el cabecero. En ese momento se utilizaba la suela de zapato con forma de raqueta “tipo pyta jovái”, pues el último de la fila se la ponía por la bota y borraba todos los rastros que había.
Lea más: Ejecutan a Luis Lindstron en una estancia de Tacuatí
Lindstron, una de las tantas víctimas del EPP
El ganadero Luis Alberto Lindstron Picco fue secuestrado por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) el 31 de julio de 2008 y liberado el 12 de setiembre del mismo año. Sin embargo, el terror no terminó ahí, pues fue asesinado por el grupo criminal el 31 de mayo de 2013 en un camino interno de la estancia “Paso Itá” de Tacuatí, en un área que arrendaba para la elaboración de carbón.
Lindstron, que en 2008 tenía 58 años, tuvo que sobrevivir durante los 40 días de su secuestro sobreponiéndose a todo tipo de obstáculos y desafíos de supervivencia cuando se encontraba en el monte.