Corbeta fue enjuiciado por el JEM porque ratificó la negativa de la ahora exfiscala Raquel Fernández, de solicitar los extractos de llamadas de teléfonos celulares –entrantes y salientes– que realizaron al entonces comandante de la Policía Críspulo Sotelo, en la noche del 31 de marzo de 2017.
Este pedido de informes de extractos de llamadas fue solicitado por el exquerellante de la muerte de Quintana, abogado Guillermo Duarte Cacavelos, quien pretendía conocer las identidades de quienes llamaron al comandante de Policía para ordenar el atropello al local partidario del PLRA.
Fernández, quien luego renunció al cargo de agente fiscal, había argumentado que el pedido de extractos de llamadas serviría solo para alimentar el morbo de la gente, ya que no tendría utilidad para la investigación del homicidio.
El enjuiciamiento de la exfiscala Fernández tendrá que ser archivado por el Jurado.