Orué relató que recibieron el martes la denuncia anónima de que un boliviano que estaba haciendo trabajos de cableado en la ciudad de Ñemby cayó de una escalera. Cuando los vecinos lo ayudaron e intentaron llevarlo al hospital, se negó rotundamente.
“Luego, entrando en confianza, les comentó cómo estaba trabajando y de dónde venía, entonces al ciudadano le pareció importante realizar esta denuncia y se comunicó con la Dirección General de Fiscalización”, añadió.
El viceministro contó que tras un trabajo de investigación lograron encontrar a los bolivianos trabajando en la calle. Los fiscalizadores se constituyeron para determinar su forma de ingreso, si cumplían con todos los requisitos para estar trabajando en Paraguay y si se respetaban los derechos de los trabajadores inmigrantes.
“Les encontramos a cinco de ellos que dijeron que efectivamente entraron en un grupo de 50 personas el 1 de octubre por el Chaco y que estaban trabajando para una empresa de nombre HANSA”, detalló.
La Ministra del Trabajo ordenó una inspección general contra dicha firma y se detectó que la empresa HANSA no existe.
“El domicilio dado es una escribanía que se encuentra acá en el centro. No podemos abrir ningún sumario porque no existe la empresa, hay direcciones de declaraciones en la SET y el Ministerio del Trabajo y las dos están en el mismo lugar. Al hablar con los trabajadores nos dieron una dirección en Fernando de la Mora, se constituyeron también los fiscalizadores y se determinó que tampoco existía, el lugar era un baldío”, confirmó.
Los funcionarios del Ministerio del Trabajo volvieron al lugar para buscar a los bolivianos pero ya no los encontraron. Por ese motivo inmediatamente se activó un protocolo distinto y se informó a Migraciones, institución que confirmó que no pudo haber sido un ingreso legal porque no hay registros de que bolivianos hayan llegado por el Chaco.
Agregó que la directora de Migraciones, María de los Ángeles Arriola, prometió iniciar las investigaciones para ubicar a los bolivianos.
Orué también adelantó que van a presentar una denuncia ante el Ministerio Público para indagar la existencia de un hecho punible, por si fuera un caso de trata de personas o algo similar.
En otro momento, recordó que en noviembre del año pasado ya recibieron denuncias de este tipo, sobre el ingreso de bolivianos para realizar ciertos tipos de trabajo. “Lastimosamente, no pudimos dar con ellos porque estaban en una zona muy lejana, hacia Capitán Bado. Afortunadamente, en esta ocasión nos pasaron la ubicación exacta de donde estaban realizando el trabajo y pudimos ubicarlos”, resaltó.
“Nosotros, como Ministerio del Trabajo, no estamos en contra de que un extranjero entre al país para trabajar. Lo que queremos es que se cumplan con los requisitos legales. ¿Qué hubiese pasado si esa persona que cayó de las escaleras moría? ¿O si necesitaba terapia intensiva, cómo iba a entrar a un hospital público?”, manifestó Orué.