Una denuncia ciudadana sobre el presunto abuso a la perrita por parte de adictos en un baldío movilizó a las autoridades del la dirección encargada de resguardar los derechos animales, que se abocaron ayer ya a tratar de localizar al can para ponerlo a salvo.
Tras una primera búsqueda infructuosa, lograron llegar a la información que una familia humilde pero de gran corazón acogió a la perrita y la puso a salvo hasta que en la fecha acudieron responsables de la institución estatal para tener un mejor diagnóstico y asistir al animal.
A simple vista se constataban heridas abiertas y un tumor, y actualmente se encuentra en una veterinaria para ser tratada de sus lesiones.