Ángel Ciullo, guardaparque del Cerro Kõi, manifestó que el incendio comenzó aproximadamente a las 13:00, en las inmediaciones de la reserva forestal-turística. Agregó que el fuego arrasó con los límites del cerro rápidamente debido al fuerte viento que se tiene en la zona.
Bomberos de varias compañías acudieron al llamado de auxilio y están tratando de sofocar el fuego que ya consumió una vivienda, que tenía techo de paja, situación que facilitó que el fuego se propagara velozmente.
En la casa se encontraba un joven con su madre de avanzada edad que fueron socorridos por los vecinos. Ellos lograron salvarse así como un vehículo que se encontraba en el lugar, pero las demás pertenencias fueron consumidas en su totalidad por las llamas.
Los pobladores manifiestan que en un momento dado la situación fue desesperante ya que era imposible controlar el incendio.
Las llamas se propagan y amenazan con llegar a las viviendas de los vecinos. La intensa humareda también afecta la visibilidad de los conductores en el tramo Areguá-Capiatá.
Los bomberos reportan tres incendio en simultáneos, uno en Cocue Guasu, otro en Isla Valle, y el de mayor magnitud del Cerro Kõi.
Los carros hidrantes se están abasteciendo en una pileta que se encuentra en la casa siniestrada. El guardaparque Ángel Ciullo también dijo que desde el mes de julio vienen realizando campañas de concienciación con los vecinos para evitar quemar las basuras, para así evitar una catástrofe.
“La impotencia se apoderó de nosotros. Fue triste ver cómo el fuego avanzaba en el cerro y no podíamos hacer nada. No sabemos dónde comenzó, sólo vimos llegar el fuego y casi se incendió nuestra caseta”, dijo Ciullo.
Por otro lado, el dueño de la vivienda quemada, quien prefirió el anonimato, dijo que nada se pudo hacer para rescatar sus pertenencias. Agregó que una vez que el fuego consumió todo, se apagó sólo. Los vecinos también lamentaron la falta de agua en el lugar y agregaron que los cortes por parte de la aguatera Ko’e ju, son constantes.