El presidente de la Asociación de Transporte Escolar del Paraguay, Rolando Martínez, dijo a ABC que lamentan el ninguneo del Estado hacia ellos y sus familias. Muchos sufren problemas de salud por la desesperación, mientras que otros son requeridos por prestamos anteriores, recalcó.
Detalló, por ejemplo, que la Cooperativa Capiatá -que tiene varias cuentas de los socios- les está exigiendo constantemente ponerse al día. Y los préstamos solicitados a través del Fondo de Garantía del Paraguay (Fogapy) son rechazados porque les piden como requisito una proyección de ingresos.
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Martínez contó que hasta plantearon ser contratados por empresas para hacer servicios de traslado y un subsidio mediante una ley que hasta el momento no prosperó.
Pero no solo están afectados los choferes y dueños de los vehículos sino también sus azafatas, con lo que la cifra de personas sin este sustento llega directamente a los 8.000 trabajadores. No descartan una nueva movilización en los próximos días para exigir asistencia al Gobierno.