Este sábado el río Paraguay en Asunción bajó 4 cm, para posicionarse a solo 0,10 m y continuar con su estrepitoso descenso que se registra desde finales del mes pasado. A mediados de agosto, el cauce hídrico había llegado a los 0,40 m, pero tras este registro, subió progresivamente durante 15 días hasta llegar a los 1,18 m, el 30 de ese mes. Sin embargo, desde inicios de setiembre su caída ha sido sostenida.
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Según expresiones del titular de la Dirección de Meteorología e Hidrología, Raúl Rodas, esta bajante es la peor en unos 50 años, después del lapso de tiempo entre 1966 y 1973, cuando se registró una pronunciada bajante del nivel del río Paraguay, cuya altura mínima histórica en el Puerto de Asunción es de -40 cm, que se dio en en el año 1969.
Cabe recordar que el cauce hídrico había llegado a 7,58 m a finales de mayo del año pasado pero su máxima registrada en lo que va de este 2020 fue de solo 3,28 m, exactamente el 1 de enero.
Entretanto, en las medidas del río Paraguay son las siguientes: en Villeta, 0.27 m; en Alberdi, 0.77 m; en Pilar 0.80 m; en Bahía Negra 1.01 m y en Concepción 1.17 m, registros que son igualmente bajos en comparación a los históricos de las respectivas zonas.
En ese contexto, el Ing, Luis Jara, gerente de Navegación e Hidrografía de la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP), señaló que desde el inicio del año no se dieron las lluvias necesarias para que el río se recupere y actualmente ya se encuentra en una situación crítica. “Todavía no era la época de bajantes, entonces se complica mucho”, expresó.
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Recordó que en el ’69 se dieron registros negativos, es decir, 40 cm por debajo del cero, especificó. Agregó que normalmente hay periodos de aguas bajas y de aguas altas. “En la década del ’60 era un periodo de aguas bajas, luego vino un periodo largo de aguas altas y desde el 2000 hasta el 2013, se tuvo un periodo de aguas bajas. En estos últimos años tuvimos un periodo de cinco años de aguas altas, no sé si recuerdan que el año pasado tuvimos una gran creciente, pero ya no tuvo un crecimiento importante desde el año pasado”, detalló.
Comentó que normalmente el río Paraguay siempre tiene un pico alto en el invierno y entre diciembre y febrero están en niveles inferiores. Asimismo, contó que para fines de setiembre y comienzos de octubre se registrarían algunas lluvias importante. No obstante, confesó que desconoce si estas cantidades del líquido vital serán suficientes para que el río se recupere.
Indicó que además de afectar la navegabilidad, esto afecta a las personas que dependen de los cauces hídricos para su consumo, puesto que esta situación de descenso no solo se registra en el río Paraguay. Acotó que en el río Paraná se está dando una situación similar.