Según dijo, existen cuatro niveles que dictan a nivel mundial el ingreso a UTI. Aseguró que la prioridad uno son los pacientes con enfermedades agudas con posibilidad de vida de un 90%, prioridad dos son aquellos pacientes que necesitan alguna intervención y aseguran la sobrevivencia en un 70%, prioridad tres son pacientes que aseguran recuperación en un 50% y la prioridad cuatro, aquellos pacientes con enfermedades terminales. “Los que generalmente ya no tienen criterio de ingreso o son de última prioridad son los pacientes con alzheimer y que tienen alguna otra patología. Si hay un paciente joven y otro encamado que ya no está lucido, obviamente la prioridad va ser el paciente joven”, dijo.
Explicó, no obstante, que a la fecha no se ha necesitado dejar sin terapia a un paciente, ya que a pesar de que las camas de terapia están al límite, se liberan constantemente. “Esta mañana había 22 camas y en cuestión de horas, se liberaron 15. Si un abuelo encamado, con enfermedad de base y covid necesita de terapia y hay camas, claro que va tener”, enfatizó.