William Toledo, desarrollador y vocero de un grupo de ingenieros de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (UNA)- manifestó que a la cartera sanitaria no le interesó el prototipo de respirador médico que fue creado en el marco de una competencia impulsada por el Conacyt. "Hay un grupo grande que está trabajando en los respiradores. Yo soy parte del grupo, pero realmente el Ministerio no se acercó a ver los equipos, hubo un llamado del Conacyt”, mencionó.
Según explicó, el respirador -que empezó siendo manual y posteriormente se adecuó para su uso en cuidados intensivos- representaría una gran ventaja si puede ser fabricado a nivel local y que también, esto implicaría una reducción en los costos de los equipos. “No tenemos apoyo del Ministerio de Salud, no hay un interés, esto reduciría bastante los costos y se podría exportar incluso, la ventaja es la producción local e ir mejorando”, contó.
Conforme a sus declaraciones, el respirador desarrollado por el grupo solo necesita la certificación para lo que precisan una validación de buenas prácticas y manofactura, que actualmente no existe en el país ya que es el primer diseño de este tipo que se realiza a nivel nacional. “Nunca se hizo un dispositivo así en el país. Eso es una traba porque no podemos enviar afuera y no tenemos los laboratorios de ensayos para implementar”, expresó.
Contó que hay otras empresas que también cuentan con prototipos de respiradores, pero que además se enfrentan ante las mismas trabas ya que el Ministerio de Salud no se interesa en ayudar a obtener la certificación.
Resaltó que de lograr la fabricación y comercialización de los respiradores, se reducirían considerablemente los costos en el país y también podrían llegar a competir en los mercados internacionales.
Destacó que un respirador de este tipo podría tener un costo de US$ 15.000, este precio podría ser inferior de producirse en Paraguay. Además, se podrá cubrir la necesidad a nivel local y luego pensar en exportar.
Toledo denunció que desde mayo están con las gestiones ante la regencia sanitaria, que ni siquiera se acercó a ver los equipos.
Nota relacionada: Se estiman más de 3.000 muertos para fin de diciembre si sigue la relajación