El representante de las pequeñas y medianas industrias y miembro de UIP, Luis Tavella, indicó ayer a nuestro diario que la pandemia ha tenido un impacto fuerte en el sector de la construcción y que si bien continuaron las obras, el ritmo no fue el habitual y eso se reflejó en la demanda de la mano de obra y materia prima.
Recordó que se había propuesto al Gobierno que realice las gestiones necesarias para disponer de US$ 300 millones para gestionar a través de la Asociación Financiera de Desarrollo (AFD) y el Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) para construir viviendas, de entre US$ 50 y US$ 80.000 cada una. Consideró que esas organizaciones gozan de confianza para que se encarguen de administrar los fondos en el sistema financiero, con tasas razonables y plazos de 15 a 20 años. “De esa manera se amortiza el trabajo en cientos de empresas de la construcción y miles de proveedores”, explicó.
Agregó que las viviendas estarían dirigidas a la clase media.
Estimó que mediante este mecanismo, se permitiría un mayor dinamismo para todo el sector y no solo a un grupo de empresas, como pasa ahora con los fondos que maneja el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH). “Tenemos que apuntar a las mipymes para crear el consumo y así, avanzar hacia la reactivación que nos urge”, dijo.
Hoy se conmemora en Paraguay el Día Nacional de la Industria y en tal sentido, el presidente de UIP, Gustavo Volpe, puso énfasis en la necesidad de proteger a los industriales, ante un escenario actual hostil por la invasión de productos de contrabando, que atentan directamente sobre la mano de obra de numerosos compatriotas que dependen de la industria local.