Los estudios para esta vacuna empezaron el lunes pasado en Argentina, informó la agencia EFE. César Ocampos, compatriota residente en Argentina, contó que fue uno de los que se inscribieron y que espera ser llamado para formar parte del experimento. “Las informaciones del laboratorio me ayudaron a decidirme hace un mes”, indicó este jueves en conversación con ABC.
“Más que (sentir) miedo, es una decisión personal en lo que uno puede ser como voluntario. Es difícil explicar, pero a uno le mueve. En esta pandemia hubo mucha necesidad hasta ahora y sobre esa necesidad uno saca fuerzas”, explicó el paraguayo, que tiene 39 años y vive en la capital argentina.
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Uno de los factores que ayudaron a Ocampos a tomar la decisión fue la información en el sitio web de la farmacéutica y los datos que indican que esta vacuna específica tiene un porcentaje de efectividad del 91%.
Coincidentemente, ayer el gobierno de Alberto Fernández informó que en Argentina se producirá otra de las vacunas que se están desarrollando, la de la Universidad de Oxford, que elaborará la farmacéutica AstraZeneca.
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EFE informó que la vacuna de Pfizer se hará en Argentina, Estados Unidos, Alemania y Brasil. Más de 25.000 voluntarios se anotaron. En el sitio web de la empresa se aclara que la mitad de los participantes del estudio recibirán la vacuna en desarrollo, mientras que la otra mitad recibirá placebo en forma de inyección fisiológica. Así, los científicos podrán evaluar los resultados de ambos grupos comparándolos entre sí, para comprobar si la vacuna es o no efectiva contra el coronavirus.
Por su parte, según informaron a ABC, otra compatriota residente en la capital argentina de nombre Mónica Gavilán Cáceres también ya está citada para concurrir al Hospital Militar Central de Buenos Aires y ser parte del grupo que testeará la efectividad de la vacuna Pfizer.