El economista, quien la última semana logró el acuerdo constitucional de la Cámara de Senadores, de forma unánime, su designación como miembro del Directorio del BCP, conversó con ABC sobre su futuro rol en la banca matriz, los desafíos en la regulación del sistema financiero, así como la necesidad de contar cuanto antes con una estructura que supervise los fondos de pensión.
–¿Debería el BCP ser la institución que supervise los fondos de pensión?
–Aunque hay distintos modelos, considerando las economías de escala en el funcionamiento institucional, la necesidad de recursos humanos y financieros y un enfoque basado en una gestión integral y sistémica de riesgos, pienso que el proyecto original situaba a la Superintendencia de Pensiones en la estructura institucional del BCP.
Hay ventajas para los reguladores de bancos, seguros y pensiones si está bajo un mismo techo.
–¿ Cuál es el propósito de esta supervisión?
–Claro que todos estos argumentos son importantes, pero más importante aún es tener la Superintendencia de Pensiones lo antes posible, de manera a precautelar el buen uso de los recursos del ahorro de las personas y preservar su poder adquisitivo para solventar las actuales y futuras jubilaciones.
–¿Cómo ha tomado esta designación al directorio del BCP?
–Me siento honrado y entusiasmado con esta oportunidad de contribuir con nuestro país desde el Banco Central del Paraguay. Esta oportunidad es fruto del trabajo durante mi carrera, del apoyo de mi familia y de la confianza y reconocimiento del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo.
–¿Qué áreas estaría manejando dentro del Directorio?
–Más allá de las áreas que estaría coordinando o de cualquier plan o ideas que quiera implementar, entiendo que el trabajo en el Directorio es el de un cuerpo colegiado y como tal mi aporte será desde mi formación y experiencia en las decisiones de política económica.
–¿Cuáles serán sus aportes dentro del BCP?
–Aportaré ideas para el debate en cuanto a iniciativas que brinden mayor certidumbre sobre el escenario económico y sobre las políticas macroeconómicas, al tiempo que contribuiré con mis conocimientos sobre la política fiscal y las posibilidades para la coordinación de las políticas macroeconómicas. Además de generar confianza sobre el cumplimiento de los objetivos de estabilidad de precios y financiera, con una postura de política monetaria acorde y un BCP autónomo e independiente, guiarán el sentido de mis aportes en el directorio.
–¿Qué opinión tiene sobre la gestión del Banco Central y ante las acciones que se tomaron en la crisis actual?
–El momento y la cuantía de la reacción en cuando a la inyección de liquidez, reducciones de la tasa de política monetaria y las medidas financieras del BCP fueron propicias, con medidas que no tienen precedentes, muchas de las cuales se extienden hasta fin de año. Con la reducción de las tasas de encajes han puesto a disposición liquidez por cerca de 3% del PIB y la reducción de la tasa de política monetaria hasta el 0,75% ubica al BCP entre los bancos centrales de la región de mayor reacción expansiva.
–¿Las medidas de flexibilización fueron suficientes?
–En cuanto a las medidas de flexibilización regulatoria, las mismas han sentado las bases para facilitar los procesos de refinanciamiento o reprogramación parcial de créditos, extender períodos de gracia y evitar el deterioro de la categoría de los clientes, sin que eso signifique una necesidad de mayor previsión o mayor compromiso del capital para las instituciones financieras. Hoy las instituciones financieras pueden hacer líquidas carteras de activos y hasta Bonos de la Tesorería, lo que no tiene precedentes en tiempos recientes.
–¿Hasta cuándo deben mantenerse estos estímulos?
–La política económica en general y la política monetaria en particular están orientadas a mantener el impulso y estímulos por el tiempo que se requiera para asegurar una recuperación sostenida y sólida de la economía nacional.
Hay medidas que se extienden hasta fin de año, pero que pueden capitalizarse por más tiempo, como las posibilidades de reprogramaciones, parciales o totales, de créditos, lo cual no requiere previsiones por 18 meses desde el momento inicial, pudiendo previsionarse por un periodo de hasta 60 meses posteriores.
–¿Esto incluye también a la tasa referencial de política monetaria?
–En el marco de política de metas de inflación, el BCP seguramente seguirá evaluando el escenario hacia delante y los riesgos, a fin de tomar de forma anticipada las medidas sobre la orientación de la política monetaria y el nivel de la tasa de interés de política. El nivel actual de 0,75% de la tasa de interés de la política monetaria es adecuado, así como las facilidades de liquidez, todo lo cual seguirá generando un ambiente propicio para la recuperación gradual del crédito, el consumo y la inversión, con efectos positivos en las ventas y la generación de empleo.
–En materia de regulación del sistema financiero ¿como está el BCP y qué aspectos deberían reforzarse?
–Estamos bien y hemos avanzado con el nuevo marco legal del BCP. La regulación del sistema financiero está en línea con las mejores prácticas y recomendaciones de organismos internacionales especializados. La institución ha dado pasos importantes en la regulación financiera, con un enfoque basado en riesgos, lo que seguramente se seguirá impulsando. Asimismo, las nuevas instancias como el Comité de Estabilidad Financiera, donde se conjugan instituciones de regulación y hacedores de política, es otra instancia que seguramente extenderá los esfuerzos en pos del resguardo de la estabilidad y solvencia del sistema financiero.
El mercado financiero es en todo el mundo uno de los sectores más regulados y los estándares internacionales con respecto a la regulación deben implementarse en pos de la transparencia y credibilidad que una economía que participa en los mercados internacionales requiere, pero atendiendo las particularidades del mercado local. Seguir avanzando en la implementación de las Normas Internacionales de Información Financiera es un compromiso de todos los actores del mercado y de la misma sociedad.
–Como está el funcionamiento del sistema financiero nacional, cómo puede lograrse una mayor bancarización?
–Mi visión es que el sistema financiero goza de buena salud, lo que se explica en buena medida porque ha venido incorporando un sistema de gestión eficiente, con una regulación rigurosa de la Superintendencia de Bancos, todo lo cual resulta en un sistema bancario y financiero solvente y líquido. Hay aspectos en los que se puede seguir avanzando, como lo relacionado con el sistema de pagos y transferencias a nivel nacional.
Perfil del nuevo director
Humberto Colmán (43 años), economista por la Universidad Nacional de Asunción (UNA), posgrado en Macroeconomía Aplicada por la Universidad Católica de Chile. Funcionario de carrera en el Ministerio de Hacienda, donde se desempeñó como director de Estudios Económicos, director de Política Macro Fiscal (2014-2017), y viceministro de Economía (2017-2020), se desempeñó como docente en la Universidad Católica de Asunción (UCA).
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