La senadora Esperanza Martínez contó que el expresidente y ahora senador Fernando Lugo le pidió al presidente de Argentina, Alberto Fernández, una ayuda para contar con hisopos y reactivos para la detección del coronavirus, ya que el Ministerio de Salud realiza un “bicicleteo” sistemático asegurando provisiones solo por dos semanas a la espera de una compra grande de kits que, hasta ahora, no se concretó.
“En ese momento en el que nos estábamos quedando sin hisopos, sin reactivos, cuando estaban aumentando los casos, en una conversación entre el presidente Alberto Fernández y el expresidente Lugo hubo una intención solidaria de enviar 50.000 hisopos y 30.000 reactivos”, dijo la legisladora del Frente Guasu.
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Argentina pidió todos los detalles de cuáles eran los reactivos que se necesitaban y los legisladores iniciaron conversaciones con el Ministerio de Salud. Sin embargo, Martínez indicó en conversación con ABC que la demora en cuanto a la respuesta de cómo ir a buscar esos insumos fue excesiva, tanto que Argentina se quejó.
“Empezamos los trámites y dejamos en manos de los ministros de ambos países. Allá nos reclamaron. Tal vez la dificultad de este Gobierno sea su capacidad de gestión”, indicó la senadora del bloque socialista de la Cámara Alta.
Luego del reclamo, Paraguay ordenó buscar estos insumos, pero por tierra. “Están diciendo que todo está aquí (los argentinos) y que es cuestión de que el gobierno venga a retirar. Eso me puso rabiosa. No sé cuánto cuesta enviar un avión del Ejército”, sostuvo.
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La exministra de Salud ironizó indicando que tal vez los insumos puedan venir “en el regazo” de Macri, recordando el momento en el que se elaboró un protocolo a medida para el ex presidente argentino Mauricio Macri, a pedido de su amigo Horacio Cartes, exjefe de Estado.
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“Nos cuesta tomar decisiones más efectivas o eficaces. Ese fue el reclamo ayer (...) Gestión es lo que nos está faltando”, agregó Martínez.
La senadora criticó duramente que el Gobierno no haya conversado con las autoridades regionales de Alto Paraná para anunciar un retroceso de fases. “Está el tema de los equipos de crisis. Cuando se tiene que aplicar en un conflicto social, no se puede hacer sin pensar en la mesa de negociación con los principales actores”, opinó.
Finalmente, indicó que el descreimiento hacia el Ministerio de Salud se traduce también en que la ciudadanía no crea en la existencia del coronavirus. “Eso es lógico, la gente busca qué comer, por eso piden que se abran las fronteras. Atropellás porque tenés que comer”, concluyó.