La Contraloría publicó hoy las declaraciones juradas que el senador Ernesto Javier Zacarías Irún (ANR), investigado por enriquecimiento ilícito, lavado de dinero, declaración falsa y lesión de confianza, presentó entre 2001 y 2007, periodo en el que fue intendente de Ciudad del Este. No incluyó las DD.JJ. del periodo en que fue diputado (1993-2001).
En 2018, al jurar como senador, Javier Zacarías declaró más de G. 12 mil millones sólo en bienes raíces, además de una aeronave, unos G. 5.000 millones en efectivo, G. 250 millones de línea de crédito en una tarjeta para su hijo, entre otros lujos.
El crecimiento patrimonial comenzó a registrarse, según indican ahora las declaraciones juradas, cuando Javier Zacarías ingresó a la Municipalidad de Ciudad del Este como intendente. Entre 2001 y 2007, cuando se retiró para cederle el cargo a su esposa Sandra McLeod, el aumento del patrimonio fue de 124%. Entró sin declarar ningún vehículo y con un solo inmueble, en Hernandarias. Salió con una camioneta Kia Carnival, un nuevo terreno en Ciudad del Este -producto de una herencia familiar- y un lote en el cementerio de la capital departamental.
Hacía de prestamista
En su declaración jurada de 2001, Javier Zacarías dice que tiene “deudas a cobrar” por G. 550 millones. Entre sus deudores aparece Héctor Durañona, cuya casa de cambios supuestamente “mau” fue intervenida en diciembre de 2008 por la Seprelad, la Senad y Tributaciones.