El panorama en Marina Cue, epicentro de aquel suceso, no está bueno, debido a la profunda división entre sus miembros. Por una parte, Martina Paredes y su grupo, por otra parte, los Castro y sus adherentes, que mantienen un conflicto que llegó hasta estrados judiciales.
El grupo que respalda a los Castro mantiene una firme postura en aprovechar los recursos naturales (maderas) para la construcción de viviendas y otros menesteres, postura que es rechazada por Martina Paredes y sus adherentes, llegando a plantear una denuncia por tala ilegal de árboles ante la fiscalía de Curuguaty.
Lea más: Ocho años de la masacre: homenajean a policías caídos
Con esta disyuntiva, la organización que lidera Paredes organizó un pequeño encuentro en la mañana de este lunes, a la Vera de la Ruta PY03, justo en el acceso a las tierras de Marina Cue, donde se llevó a cabo una celebración religiosa con la presencia de varios referentes sociales y políticas. En la ocasión se asumió el compromiso de mantener la lucha por las tierras donde cayeron campesinos y policías.
El lugar donde actualmente habitan más de 300 familias fue declarado como reserva natural “Yverá “durante el gobierno anterior, con la administración de Campos Morombí. Sin embargo, los dirigentes aseguran que volverán a plantear que se derogue dicha ley, para que las mismas sean entregadas a las familias quienes actualmente las ocupan.
Martina Paredes dijo que, en febrero pasado, estuvieron en la comunidad los funcionarios del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), para el estudio correspondiente, pero aclaró que las gestiones pararon por la pandemia.