Chaparro, representante de la Asociación Industrial de Confeccionistas del Paraguay (AICP), comentó a nuestro diario acerca de la materia creada para la confección de batas. Se trata de un “tejido inteligente” denominado “NTA 98”, que son las siglas de “No Tejido AICP”, mientras que la cifra es porque tiene un 98% de resistencia microbacteriana, certificada por el Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN).
Explicó que el tejido tradicional consiste en ligamentos de hilos y que en este caso, la estructura del material no es así. Se trata de una aglomeración de fibras que son estiradas y sometidas a presión y calor, y se logra una lámina parecida a la textil. La firma que la fabrica es “Mega Plásticos”, cuyo representante es Ronaldo Polessi, informó.
Santiago Colombino, otro miembro del gremio, destacó la importancia del logro de la materia prima, teniendo en cuenta la escasez que se registra en el mundo. Ahora es posible fabricar batas hospitalarias de calidad y, a la vez, inyectar recursos a la industria, en un momento de gran urgimiento de tener estos insumos de salud y de que las empresas tengan recursos, tras la paralización total para evitar contagios del coronavirus.
Mencionó que la nucleación articulará los mecanismos para dar la mayor participación posible a los confeccionistas, garantizando la transparencia del proceso. Para ello, indicó que se clasificarán las empresas en tres niveles: primera, segunda y tercera línea. La primera estará compuesta por las que tienen experiencia como proveedoras del Estado; la segunda, por las que vendan el producto terminado a la primera línea, y la tercera, que se dedicará a la producción. Indicó que las firmas podrán realizar las negociaciones como lo consideren.
En cuanto a los permisos necesarios para ser proveedoras del Estado, las firmas que los tengan podrán contratar a aquellas que no y serán las responsables de que las subcontratadas cumplan todos los requerimientos necesarios.