Politólogo apunta a decepción ciudadana porque el Estado “cayó en los mismos vicios de siempre"

El politólogo Marcos Pérez Talia habló de que las irregularidades en compra de insumos generan mucha rabia en la ciudadanía porque esta se aisló pensando que el Estado se estaba preparando. “Asumimos que este tiempo de espera era para que el Estado se prepare y aparentemente no solo no se preparó, sino que siguió con los mismos vicios de siempre”, aseveró.

Tapabocas vencidos en el caso de la Dinac.Lorena Aponte
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Paraguay ya supera los 50 días de encierro y la situación se complica por la falta de trabajo, ingreso en los hogares y por ende, muchas familias están pasando hambre. Al respecto, habló con ABC el politólogo Marcos Pérez Talia, sobre el escenario de decepción que se puede observar en la ciudadanía después de que se desmantasen irregularidades en los procesos de compra de insumos para la lucha contra la COVID-19.

Reconoció que ningún Estado estaba preparado para esta pandemia y recordó que la confianza de la ciudadanía era baja hacia la clase política, pero apuntó a que por lo menos en esta situación los paraguayos esperaban que se actúe correctamente.

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“El Estado nos obligó a todos a encerrarnos, violaron derechos básicos como el ingreso al país, todo eso en el marco de la supervivencia y en todo este tiempo de espera asumimos que el Estado se iba a preparar, asumiendo que el contagio es inevitable, sin embargo vemos todos los días en la prensa que se habrían hecho algunas irregularidades en ese proceso, lo cual nos duplica nuestra rabia. Asumimos que este tiempo de espera era para que el Estado se prepare, y aparentemente no solo no se preparó sino que siguió con los mismos vicios de siempre”, expresó.

La crisis es una oportunidad para el cambio en la estructura del Estado

El especialista manifestó que este escenario está propiciando un resurgimiento del Estado y considera que esta pandemia le va a dejar diferente al mundo. “Algunas cosas van a cambiar y esa va a ser la mirada hacia el Estado, el Estado es la estructura básica que garantiza nuestra supervivencia, gente que toda la vida renegó del Estado hoy de manera positiva se está dando cuenta de que había sido el Estado había que fortalecerlo, hay que atender muy bien quiénes van a participar de esa reforma del Estado, y hacia qué Estado están apuntando”, recalcó.

Agregó que a partir de esto espera una mejora en la calidad de servicios públicos básicos y si se llega a reformar el Estado que no sea solo en apariencia, sino real.

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“A mí no me generan confianza (los actores políticos), no solo no me generan confianza desde el punto de vista de su gestión histórica, sino que también me hace mucho ruido que los que fueron citados a reformar el Estado tienen la misma ideología, todos son gente pudiente, que cree que el funcionariado público es una carga, gente que tiene mucho dinero y que cuando se enferma va al Sirio Libanés a tratarse. En los términos de la reforma que nosotros queremos, creo que sería real una reforma abarcante, incluyente, si no incluimos al campesinado y a los sectores críticos de la sociedad civil, ¿qué Estado paraguayo nuevo puede surgir de ahí?", cuestionó.

Aseveró que si las mismas personas que integran actualmente la clase política llevan adelante este proceso, “va a ser una reforma edulcorada, maquillada; van a recortar gastos superfluos, pero eso no es reforma del Estado”, subrayó.

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“Esta pandemia dejó mucho más en desnudo aún muchas falencias en derechos básicos que debería otorgar el Estado. Es muy necesaria la participación y sobre todo la presión”, enfatizó.

Cabe recordar que desde ya son varias las irregularidades que se detectaron en procesos de licitación para la compra de insumos en el marco de la contingencia del nuevo coronavirus. Entre ellas se pueden citar las mascarillas compradas por la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), también los insumos comprados por Petropar y los inconvenientes registrados en la adquisición por parte del Ministerio de Salud que encargó una gran cantidad de insumos y pagó un adelanto por ellos, pero que debió devolverlos porque registraban defectos.

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Actualmente son 333 casos confirmados en el país de la COVID-19, de los cuales 115 se recuperaron y 10 fallecieron. Asimismo, Paraguay cumple 53 días de cuarentena, medida que se anunció el pasado 10 de marzo, que en principio iba por 15 días, sin embargo, se extendió en varias ocasiones. Actualmente el aislamiento total iría hasta mañana y desde este lunes inicia lo que se llama “la cuarentena inteligente”, que consiste en la flexibilización por fases.

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