Conforme al testimonio de dos connacionales que viajaron con Karim Salum - hermano de uno de los hombres cercanos del expresidente Horacio Cartes- ni bien arribó el avión al aeropuerto Silvio Pettirossi, la fiscala Teresa Sosa ingresó y en altavoz pidió que todos los pasajeros que permanezcan en sus asientos, ya que tenían una lista y que iban a ser llamados uno por uno. El primero en ser llamado fue Karim Salum. “Ella solamente apartó a dos personas - una de ellas fue Karim - y después no se le escuchó más a ella”, según señaló uno de los repatriados.
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Seguidamente, funcionarios del Ministerio de Salud fueron quienes se encargaron de llamar y conformar los grupos para ser derivados a los centros de cuarentena. Según detallaron ningún otro pasajero tuvo oportunidad de acercarse a las autoridades sanitarias ni a los fiscales para solicitar autorización para ir a guardar cuarentena a su casa.
“Nos hicieron firmar un documento donde nosotros nos comprometemos a guardar la cuarentena en el lugar y en las condiciones en las que se nos otorguen”, comentó Ricardo, uno de los compatriotas en aislamiento preventivo en el Comando de Intendencia en Mariano Roque Alonso. Este documento lo firmaron ya en Miami, antes de partir rumbo a Asunción. Los representantes diplomáticos de Paraguay presentes allí hicieron copias de estos formularios y el original quedó con los repatriados. Este documento era requisito para hacer el check in en Asunción.
Otro documento - presentando en los puestos de Migraciones de nuestro país - fue un formulario entregado por las asistentes de vuelo en el que detallaron si tuvieron síntomas relacionados al covid -19.
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Los pasajeros que compartieron el vuelo con Karim Salum - reiteraron que fue verdaderamente llamativo el trato diferenciado que recibió más aún teniendo en cuenta que fue un representante de la Fiscalía quien fue a gestionar su ingreso al país y la dispensa de guardar cuarentena con el grupo de repatriados.
Este viernes, el caso de Karim Salum quien regresó el miércoles pasado de Estados Unidos y no fue remitido a uno de los refugios, como se hace obligatoriamente con los ciudadanos “comunes” y que violó el aislamiento salió a la luz al conocerse que fue la Fiscal General del Estado, Sandra Quiñónez quien solicitó la excepción para el mismo.