Fue en la misa de la vigilia pascual celebrada, este sábado a las 20:00, en la Catedral de San Juan Bautista, Misiones.
Previo a la celebración a puertas cerradas de la Catedral y con escaso número de fieles, monseñor Collar Noguera encendió el cirio pascual al costado del templo parroquial. El obispo estuvo acompañado del párroco presbítero Rubén Reale y otros sacerdotes de la Diócesis.
Monseñor Collar invitó amablemente a los feligreses a centrar la reflexión en el evangelio, según San Mateo (Mt 28, 1-10) “donde se nos narra de manera muy particular el acontecimiento de la Resurrección y la reacción que este acontecimiento provoca en aquellos que reciben esta noticia”, señaló.
Añadió que Dios ha manifestado a través de sus Ángeles que ha llevado a cabo algo extraordinario vencer a la muerte y la resurrección de Cristo.
“La resurrección debe ser la 'Gran Noticia' que nos ayude a renovar nuestra fe y a cambiar nuestros planes y proyectos cuando parece que todo está terminado. Sobre todo, en aquellas situaciones tristes y dolorosas de nuestra vida, causados por la pobreza, la enfermedad, la muerte, la falta de trabajo y la inseguridad”, puntualizó monseñor Collar.
En otro pasaje de su homilía el obispo señaló que la pascua renueve e impulse a todos a vivir con esperanza y responsabilidad este tiempo difícil de la pandemia.
“Que hagamos lo que está a nuestro alcance para preservar y promover la salud y la vida de todos y cada uno, siendo responsables en lo que nos corresponde como cristianos y cristianas, como ciudadanos y como autoridades: quedando en casa, siendo solidario, pero también atendiendo de forma urgente los reclamos de las familias más vulnerables y proyectando juntos un mundo más humano, más cristiano, equitativo y fraterno”, manifestó.
El obispo señaló que el acontecimiento pascual, tan especial en este tiempo de pandemia, ayude a todos los hombres y mujeres, especialmente a los poderosos de este mundo a tener mayor sensibilidad por los que más sufren destinando “los recursos empleados para las armas para los fines cuya necesidad y urgencia vemos en estas situaciones: la salud, la higiene, la alimentación, la lucha contra la pobreza, el cuidado de lo creado”, expresó.
Monseñor Collar dijo que el Papa Francisco enseña que Jesucristo puede romper los esquemas aburridos “en los cuales pretendemos encerrarlo y nos sorprende con su constante creatividad divina”.
Añadió que cada vez que el cristiano intenta volver a la fuente y recuperar la frescura original del Evangelio, brotan nuevos caminos, métodos creativos, otras formas de expresión, signos más elocuentes, palabras cargadas de renovado significado para el mundo actual. En realidad, toda auténtica acción evangelizadora es siempre nueva, concluyó.