Ramírez es médica recibida en la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Hizo su residencia en Medicina Familiar en el Centro Médico Bautista y trabajó dos años en el hospital de Loma Plata, Chaco. “Quise ser médica humanitaria desde que tengo 16 años”, cuenta. Ese sentimiento la trajo de vuelta a su país en cuanto supo que aquí ya se registraban los primeros casos de esta pandemia.
Estando en Loma Plata, Belén se postuló a Médicos sin Fronteras (organización médica y humanitaria internacional) con la que trabaja desde 2010. Está casada con un norteamericano y vive en California, Estados Unidos, desde 2012.
"A lo largo de mi carrera participé en varios tipos de misiones de urgencias y epidemias. El año pasado estuve en Congo en un proyecto de ébola. Además trabajé en otras epidemias como la del cólera. Apenas supe que el virus llegó a Paraguay decidí venir. Llevo 11 días de cuarentena en Asunción y estoy trabajando con el equipo médico, con el doctor Guillermo Sequera (director de Vigilancia de la Salud del Ministerio de Salud Pública) desde los primeros días de mi llegada. Trabajamos en todo lo que es el protocolo y el sistema de prevención de la enfermedad”, señaló la doctora.
Sobre cómo siguió la expansión del COVID-19 desde su aparición en Wuhan, China, relató: “En enero nos enteramos de que había un nuevo coronavirus, pero fue como que lo veíamos un poco lejos porque pasaba en China, no nos llegaban todos los datos. Recién lo vimos más cerca cuando el caso ya era muy grave en España e Italia. Con esos nuevos datos empezamos a trabajar de otra manera, de ver la situación de otra manera”.
“Primero se hablaba de que la enfermedad era más severa en personas mayores de 60 años pero después vimos como personas de 40 años se enfermaban. Ahí nos dimos cuenta de que esto iba a ser algo grande”, recuerda.
“Cuando salí de EEUU aún no había restricciones. La restricción empezó allá hace una semana cuando la OMS pidió que se haga cuarentena. Antes de eso, todo estaba abierto, los locales, las playas, las montañas. Todo eso se tuvo que cerrar. Ahora la gente trabaja desde su casa. A mi marido le pedí que no salga. Parece algo exagerado, pero es necesario”, comentó a ABC vía teléfonica.
El llamado de la patria
En cuanto a cómo empezó a trabajar con el equipo médico de Paraguay, indicó que el doctor Guillermo Sequera fue su compañero de promoción en la facultad de Medicina y ambos comparten la filosofía que pone el foco en la salud pública y la salud humanitaria. "Yo estaba siguiendo la evolución de la pandemia, viendo la forma en que trabaja Médicos sin Frontera, viendo si es que me iba a Congo, donde todavía se tiene la epidemia de ébola, pero cuando me enteré de que el COVID-19 había llegado a Paraguay y el doctor Sequera me dijo de la situación, sentí en el corazón que tenía que estar en Paraguay”, afirmó.
Aunque todavía no puede salir de la casa donde está alojada en Asunción, por estar cumpliendo la cuarentena a la que debe someterse toda persona que llega al país desde el extranjero, ya comenzó a trabajar en el área de promoción de la salud, la organización, la logística y la preparación para una epidemia. “Estoy apoyando al equipo. Estoy feliz por poder dar una mano. No sé cuándo voy a volver a casa pero lo haré cuando se pueda”, señaló
Prepararnos para lo que se viene
Por supuesto, Ramírez reconoce que van a seguir aumentando los casos de personas con coronavirus en Paraguay, pero afirma que lo que se busca es que no suban tan de golpe para no colapsar el sistema. "Eso es lo que estamos haciendo, este tiempo que nos estamos dando es para prepararnos. Tenemos que aumentar la capacidad de los hospitales que ya tenemos. Este tiempo es para prepararnos para lo que se viene”, dice.
“Nosotros acá en Paraguay tomamos la decisión de entrar en cuarentena una semana antes de que la OMS ordenara que se entre en cuarentena. Es una estrategia sanitaria. La decisión de Paraguay de hacerlo vino de personas, referentes del área epidemiológica y sanitaria que identificaron lo que se venía y cómo estaba nuestro sistema de salud, cansado porque venía ya de una epidemia de dengue. Por eso es que se decidió ir a la cuarentena de inmediato”, añadió.
La doctora hizo énfasis en lo que se refiere a la promoción y concienciación de la ciudadanía sobre la enfermedad, sobre la importancia de la cuarentena, del cuidado, de la higiene y de lavarse las manos constantemente, para poder hacer frente a la enfermedad todos juntos.
Experiencia
Belén Ramírez es médico con 10 años de experiencia en la organización médica humanitaria internacional Médicos sin Fronteras, con la que trabaja como líder de Equipo Médico. Algunos de los territorios en donde ha trabajado durante estos 10 años son Sudán del Sur, Yemen, Colombia, República Centro Africana, Congo, Tchad, Nigeria, Camerún, México y Guatemala. Tiene experiencia en liderazgo de equipos y proyectos, manejo de recursos humanos, planeamiento estratégico, coordinación y ejecución de actividades médicas, así como organización y manejo de farmacias.
Es Manager con experiencia internacional y fundadora de la Organización No Gubernamental “Project Bike Love”.