En horas de la mañana atacó a un peatón que pasaba frente a su casa ubicada en Sajonia, Asunción, según denunció la víctima, Andrés Gosling. El hombre relató a ABC TV que el exjugador del Club Cerro Porteño lo agredió, golpeó y arrojó al suelo, hasta que acudieron familiares del propio Carlos Báez Appleyard (37) para detenerlo.
Pero “Aquiles” Báez persiguió a su víctima en la calle y llegó hasta la comisaría de la zona, sede del Departamento de Seguridad en Eventos Sociales, Deportivos y Afines de la Policía. Rompió una puerta de blíndex y fue arrestado por los agentes policiales, quienes describieron que el exfutbolista estaba fuera de sí, informó el periodista de ABC TV Claudio Genes.
La Policía sospecha que estaba bajo los efectos de alguna droga. Igualmente, sus familiares contaron que Báez está medicado y sigue un tratamiento psiquiátrico, informó el jefe de la Comisaria 2da. Metropolitana, comisario Isabelino Galeano. Está recluido en esta sede policial.
El jefe contó que, tras ser arrestado, también se constató que contaba con orden de captura por rebeldía en sus causas por perturbación a la paz pública. Se sospecha que no se presentó ante el Juzgado que controla que cumpla las medidas en un régimen de libertad.
Báez cumplía en la cárcel del Tacumbú dos condenas por dos casos de perturbación a la paz pública, ya que en 2013 agredió a un hincha del Club Nacional y en 2016 encabezó un ataque contra hinchas de Olimpia. Según fuentes, fue beneficiado con un régimen de libertad a fin de seguir un tratamiento médico, aunque este tipo de incidentes podría anular la medida.
El nuevo caso de agresión será investigado por el fiscal Eugenio Ocampo, quien citó al exfutbolista a declarar hoy a las 11:30 en la Fiscalía de Sajonia, informó el Ministerio Público.
Carlos “Aquiles” Baez afrontó varias causas por violencia. En junio de 2016 fue condenado a tres años y seis meses de cárcel al ser declarado culpable de agredir a un hincha del Club Nacional dentro de un estadio, mientras que en junio de 2018 recibió una condena de dos años y seis meses, esta vez por ser el responsable de encabezar un ataque contra hinchas de Olimpia.
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Igualmente, en noviembre del 2017 había recibió una condena de cuatro años y seis meses de prisión por instigar a la violencia contra hinchas de Olimpia, en el 2014, pero este juicio se anuló. Fue juzgado de vuelta y en la segunda ocasión, en marzo del año pasado, el nuevo tribunal de sentencia lo absolvió de culpa y pena porque en el juicio se anuló la principal prueba en su contra.