Según el viceministro de Salud, doctor Julio Rolón, tampoco es útil llevar el pánico al extremo, sino mantener la calma y cumplir con las medidas de prevención que se dieron, así como se haría con cualquier otra afección respiratoria (reducir el contacto personal, lavarse las manos, toser en la flexura del codo, etc). Insistió en que “no hay secretos”, en cuanto a la forma en que la población puede prevenir el contagio de la enfermedad. Solo es necesario poner en práctica los hábitos de higiene.
Remarcó que los hábitos de prevención y cierre de lugares con aglomeración de personas tampoco significa que “nos quedemos encerrados en nuestras casas”, sino que se debe abrir puertas y ventanas, ventilar habitaciones, pues el sol inactiva al virus.
“Nuestro clima es un milagro, hay que aprovecharlo. El sol inactiva cualquier germen. Acondicionadores de aire y ventanas cerradas es lo peor que puede haber”, dijo.
Detalló que también se pueden realizar visitas, y que solo se debe evitar “ir en masa”. “Si el vecino está resfriado no irse, pero no estar encerrados todo el día”, insistió.
No es de transmisión sexual
Ante la consulta de los oyentes sobre si la enfermedad tiene riesgos de transmisión sexual, aclaró que categóricamente no se transmite por esta vía. No obstante, el intercambio de saliva sí es una forma de contagio.
Detalló a su vez que al mantener relaciones sexuales, aumenta e nivel calórico y eso moviliza internamente las defensas del organismo.
En general, resaltó que para poder combatir un eventual contagio y curarse rápidamente, es fundamental mantenerse “en equilibrio tener una vida sana, comer bien, hacer ejercicio, dormir bien”.
En lo que refiere al consumo de alcohol, el viceministro aclaró que consumida en dosis sociales, la bebida alcohólica no afecta al sistema inmunitario. Sin embargo, el alcoholismo sí afecta a la producción de proteínas que participan en procesos inmunológicos.
Se contagia a un metro y medio
Mencionó entre otros aspectos, que el contagio de la enfermedad se produce a distancias de menos de un metro y medio, y estando expuestos durante más de 15 minutos a la persona contagiada.
Según explicó Rolón, un cuadro de coronavirus puede demorar en curarse de 15 a 30 días, si se llega a complicar y de acuerdo a la evolución. Los casos más leves pueden curarse mucho antes.
En cuanto a fiestas y reuniones ya programadas con anticipación, el viceministro dijo que tampoco significa que se deban suspender. “Si vas a hacer un cumpleaños y te das cuenta que no estarán encimadas, tampoco significa que lo suspenderemos, siempre y cuando mantengamos as medidas higiénicas, y que no vayan las personas resfriadas. También se debe tener la fortaleza de decirle a una persona que está con un cuadro gripal, que no debe estar en el grupo”, detalló el viceministro de Salud.