Finalmente, tras muchos enredos judiciales, la jueza López autorizó a la Policía a que destruya toda la chatarra de los predios de las comisarías. Estos autos, camionetas y motos están abandonados desde hace muchos años, se confunden entre la maleza y constituyen sitios ideales en donde el mosquito Aedes aegypti pone sus huevos para reproducirse.
En total, son 9.038 motocicletas, 360 autos, 81 camionetas y 37 camiones de gran porte las chatarras que serán destruidas.
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“Estos vehículos constituyen una amenaza para todos los paraguayos y paraguayas, no podemos seguir esperando de ver quién hace o no. Fui más allá y le autorizo a la Policía conforme a la Ley 6.245, en donde se habla de compactación. Estas chatarras puedan ser compactadas por empresas que se dedican a eso”, expresó López, según un informe de Carlos Ortega y Marcia Ferreira, periodistas de ABC Color.
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La magistrada reprochó al Ministerio de Obras Públicas y dijo que no debió ser la Policía la que pidiese la autorización para tomar esta medida, sino el MOPC. “Si bien (el MOPC) no se opuso, no ayudó al proceso”, indicó.
La resolución declara en estado de abandono a los aproximadamente 9.500 vehículos que están en las comisarías y la Policía deberá informar al Registro del Automotor sobre todos estos rodados, a modo de que quede registro oficial de que fueron compactados.