En “términos relativos”, el peregrinaje a Caacupé trascurrió “con bastante normalidad” desde el punto de vista de los servicios de salud, comentó a ABC Cardinal el coordinador del Ministerio de Salud Pública para el operativo en torno a la fiesta mariana, el doctor Juan Carlos Portillo.
El doctor Portillo señaló que, hasta el momento, 16.228 personas fueron atendidas por distintos probemas –en su mayoría leves– en los puestos establecidos por el Ministerio de Salud a lo largo de las rutas de peregrinación a Caacupé.
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Unas 50 personas fueron derivadas a centros asistenciales, “en su mayoría, por casos clínicos”, agregó el médico, que añadió al balance “diez traumas leves” y dos accidentes de tránsito, uno de los cuales involucró a dos ómnibus, sin heridos de gravedad.
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El doctor Portillo señaló también el caso de María Isabel Candia, de 49 años, que sufrió un infarto en la explanada de la Basílica de Caacupé en horas de la madrugada y falleció pese a los esfuerzos de personal de emergencia por revivirla.
Más allá de esos casos puntuales, el representante del Ministerio de Salud reportó que hubo numerosos casos de personas con lesiones por la marcha prolongada, como ampollas y heridas derivadas, calambres, dolores musculares y de cabeza, picos hipertensivos y descompensaciones.
En general, el doctor Portillo señaló que hubo más personas atendidas que el año anterior, pero indicó que eso se podría deber a que este año hubo más peregrinos.
Finalmente, lamentó la presencia de niños menores de diez años en la peregrinación, indicando que hubo 150 casos de niños pequeños que requirieron “algún tipo de atención” médica, entre ellos, “una decena” de menores de un año.