El actual jefe de Gabinete Civil de la Presidencia y exministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, aseguró que se acaba de enterar de que su entonces secretario José Bogado se reunió con los abogados de Messer para tratar una posible entrega de Darío Messer. En la reunión también participó el entonces jefe de Inteligencia, Crio. Ppal. Nimio Cardozo, al igual que Lorena de Barros Barreto, conocida de Villamayor y Messer, quien era nexo en las negociaciones.
La abogada de Messer, María Leticia Bóbeda, denunció que esta mujer le había pedido US$ 2 millones de coima para el entonces ministro Villamayor y los ministros de la Corte. La abogada es también requerida por la Justicia de Brasil, ya que en las conversaciones por WhatsApp con su cliente habla de la propuesta de Lorena de Barros. Las sospechas se dieron a conocer junto al pedido de prisión de un Juzgado brasileño contra el expresidente Horacio Cartes en el caso Lava Jato.
La misma Bóbeda reconoce que en esta reunión ni la mujer ni los funcionarios del Gobierno hablaron de dinero ni coima. En comunicación con ABC Cardinal, Juan Ernesto Villamayor sostuvo que fue imprudente que su secretario haya acudido y que luego no le haya informado al respecto. El exministro del Interior contó que el comisario Cardozo le reportó que se reunió con una “fuente humana” relacionada al caso Messer, pero que fue una pista infructuosa.
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Tras darse a conocer hoy que José Bogado participó de la reunión, el funcionario presentó su renuncia al cargo en el Ministerio del Interior, según confirmó el mismo a ABC Cardinal. Villamayor recalcó que cometió un error, pero minimizó su conducta y estimó que su secretario se extralimitó al tratar de colaborar en la captura de Messer.
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Por otra parte, el exministro del Interior defendió la actuación del entonces jefe de Inteligencia, pues -argumentó- era su labor seguir todas las pistas posibles, remarcó. No cuestionó que no le haya detallado que la fuente humana sean los abogados de Messer y una intermediadora, ya que en ese momento se estaba trabajando con múltiples informantes. Además, los organismos de seguridad habían descartado que Darío Messer se iba a entregar, por lo que las tratativas con sus defensores no iban a dar resultados y esa pista no iba a conducir a nada, explicó.
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