El periodista de radio Aquidabán FM de Concepción Édgar Américo Chilavert (52) le prometió a Francisco*, un niño de 12 años, que ayudaría a que su padre salga de prisión, pero a cambio le pidió favores sexuales. En un primer encuentro, en un auto en setiembre de 2017, le obligó a que le haga una felación. En una segunda oportunidad, los primeros días de octubre de 2018 y ya con 13 años cumplidos, lo llevó a un motel y allí, después de instarlo a que nuevamente le practique sexo oral, también hubo coito. En este caso, el niño, a pedido del agresor, asumió un rol activo. Todo esto de acuerdo a la acusación por abuso sexual en niños presentada el 10 de octubre pasado.

El abuso fue a partir de un chantaje, seguido de amenazas, y el menor fue coaccionado a no contar lo que le hizo y lo que fue obligado a hacer, según las pruebas que la fiscal Carina Sánchez ofrece para un eventual enjuiciamiento. Este viernes es la audiencia preliminar donde se define si la causa se eleva o no a juicio oral y público.

El relato de los abusos y las primeras conclusiones de la conducta del agresor aparecen en los informes situacionales y psicológicos elaborados por la psicóloga del Ministerio Público, María Isabel Achucarro, a partir de una entrevista con la víctima.

La profesional concluye que “el relato cuenta con concreción (claridad y definición), estructura y secuencia lógica, riqueza de detalles informados, reproducción de conversaciones, consistencia y coherencia, como también anclaje del hecho ocurrido en tiempo y lugar, según se lee en el expediente”.

El informe situacional recalca que todos estos elementos en su conjunto y en contexto de la entrevista dan sustento y credibilidad al relato manifestado. En tanto que el informe psicológico destaca que “el sentimiento imperante de la víctima es el temor”, teniendo en cuenta las amenazas de Édgar Chilavert.

"- ¿Quién te hizo?-

- Chila -

- ¿Quién es Chila? -

- Chilavert -"

Es parte de lo que se escucha decir a Francisco en la declaración testimonial observada en Cámara Gessel, según cuenta el abogado de la querella adhesiva, Emilio Camacho, quien ahora solo representa a la madre de la víctima.

Esta última declaración también se hace ante psicólogos, pero es escuchada y observada por el juez, fiscal, abogados (todas las partes), que están detrás de un vidrio de visión unilateral. Édgar Chilavert no quiso participar, confirmaron sus abogados.

“El niño pronunció frases que no me animo a reproducir por respeto a la víctima”, dijo Camacho. La diligencia de la Cámara Gessel se hizo como prueba anticipada al juicio. Hay dos copias del video y se reproducirán en el juicio.

“El menor mintió (…) El niño de 12 años le engañó a la psicóloga y le engañó a la fiscal”, dijo a ABC Color el abogado Osvaldo Sánchez Pintos, uno de los defensores de Chilavert. Recalcó que el primer relato y el relato en la Cámara Gessel son todas mentiras del menor.

Indicó que tienen un video del afectado en que confiesa que mintió y que todo es una farsa. Una hermana del chico lo habría grabado haciendo estas declaraciones, dato que no fue ni confirmado ni negado por Sánchez. El abogado se limitó a decir que en su momento se dará a conocer el material y toda la información relacionada.

Al ser consultado si un video grabado con un celular, sin las garantías del debido proceso judicial tiene más valor que una declaración con psicólogos y todas las partes en una Cámara Gessel, respondió que sí y que lo van a demostrar en caso de ir a juicio. “Es la declaración del menor. La Cámara Gessel se hizo en cualquier lugar también, con todos los elementos que vos digas, pero no es cierto lo que dijo (el niño)”, remarcó el abogado.

En tanto que el informe socioambiental elaborado por la trabajadora social Alejandra Álvarez Servín resalta -entre varios aspectos- la vulnerabilidad del adolescente, ya que confiaba en el periodista Édgar Chilavert “como referente social y éste abusó de su influencia para obligar a un niño a mantener relaciones sexuales con él”, se lee en el apartado de conclusiones.

Y volviendo al informe psicológico, la evaluación también reveló que la víctima siente culpa y vergüenza porque el caso se mediatizó y su nombre y el de su padre se publicaron en los medios de comunicación y en las redes sociales. El periodista, tras caer preso, se defendió con el argumento de que la denuncia es falsa, que el niño mintió como parte de una persecución del intendente de Concepción, Alejandro Urbieta (PLRA), a quien el trabajador de prensa cuestiona su gestión y publica los casos de corrupción que lo salpican.

Igualmente, está el diagnóstico de la inspección física, que no revela lesiones corporales en el chico, pues la víctima no sufrió una penetración, de acuerdo a su relato.

La defensa del periodista insiste en que el padre obligó a su hijo a mentir y Francisco, ya con 13 años, además de engañar a todos los profesionales psicólogos y sociológicos, también pudo simular cuadros clínicos y conductas sociales que se encuadran en los síntomas y secuelas de un abuso sexual.

Cambio de versión

El padre de Frencisco había denunciado en cuatro oportunidades a Édgar Chilavert y siempre fue la misma historia: una vez en Concepción, otra en Asunción en la Fiscalía Especializada en Hechos Punibles contra Niños, la tercera ante el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia, y la cuarta ante la asistente social que hizo la evaluación socioambiental en su comunidad.

Pero el 13 de octubre pasado acudió a los medios y cambió de versión. Dijo que su hijo mintió y que meses después le confesó la verdad: que no mantuvo relaciones sexuales con Édgar Chilavert. El hombre recalcó que el intendente le daba dinero para promover la denuncia, que los abogados querellantes lo engañaron y que todo fue una historia tramada y montada por el jefe comunal para perjudicar al periodista que lo critica.

“En mayo pasado, mi hijo negó que haya tenido cualquier tipo de relación con Chilavert. Vio una entrevista en la televisión donde se hacía mención al caso y allí me contó la verdad”, dijo en una nota para ABC Color que se publicó el mes pasado.

Con esta nueva versión fue a la Fiscalía y denunció al intendente por simulación de hecho punible y denuncia falsa. Pero el 10 de octubre de 2018 había declarado ante la fiscala Sánchez que revisando el celular de su hijo encontró mensajes en donde “mi hijo le pedía ayuda para que yo pueda salir de la cárcel y este señor le decía que me iba a ayudar pero a cambio mi hijo debía mantener relaciones sexuales con él”. También declaró que “mi hijo me dijo que se iban al motel Aquario“.

En tanto que el 23 de noviembre de 2018 se entrevistó con la asistente social Alejandra Álvarez, a quien declaró que su hijo le contó: “'Yo hice eso por vos, por tu libertad', me dijo [mi hijo](llanto, nota de la trabajadora social)”. También relató: “Me dijo que tuvo relaciones sexuales con Chilavert como tres veces. En los mensajes él le decía que si no estaba con él yo no iba a salir libre”. El padre será convocado a declarar oralmente en caso de ir a juicio.

Emilio Camacho explicó que es muy común que familiares de las víctimas de delitos contra la autonomía sexual y violencia familiar cambien las versiones e intenten proteger a los abusadores y violadores. El abogado seguirá representando a la víctima en la querella adhesiva a pesar del desistimiento del padre, pues la madre se mantiene firme en la denuncia, contó.

Y no solo el padre se contradijo. Otra expareja del hombre (que no es la mamá ni la madrastra de la víctima) ya había declarado que la denuncia es un montaje. Pero ahora esta mujer, propuesta como testigo para el juicio, se desdice y sostiene que es real.

El informe socioambiental detalla que Francisco vivía con su madrastra cuando su padre estuvo preso por un caso de conexión clandestina de la ANDE. Volvieron a convivir tras salir en libertad, pero ahora el chico vive con su hermana mayor (de ambos padres) y por disposición del Juzgado como medida de protección, en una localidad del departamento Central, ya que tuvo que salir de Concepción porque era estigmatizado a pesar de ser la víctima, según la fundamentación del fallo.

Tinte político

El padre de la víctima es operador político del jefe comunal y un conocido activista social y político de un asentamiento en Concepción. Fue el intendente quien lo apoyó para hacer la denuncia en contra del locutor, con quien mantiene un abierto enfrentamiento por su labor periodística.

De hecho, el abogado que inicialmente impulsó la querella es el asesor jurídico del intendente, Luis Cabañas. En tanto que Emilio Camacho contó que fue abogado del padre del jefe comunal, Hugo Urbieta, en asuntos relacionados a la farmacia de su propiedad. El profesional del Derecho negó que sus honorarios sean abonados por el jefe comunal y recalcó que lo financia un grupo de personas de Concepción, pero no mencionó nombres argumentando secreto profesional.

En el expediente pudimos ver que al menos nueve abogados representan o representaron a Chilavert y luego también pasaron a representar al padre de la víctima: Sánchez Pintos, Marcelo Bernal, Pablo Desvar, Richard Almirón, Santiago Quevedo O’Durnin, Marcelo Royg, José Samaniego, Daniel Alarcón y Dolly Krauer.

El abogado Camacho reconoce que existe un enfrentamiento y un contexto político, pero la fiscal Carina Sánchez sostiene que la acusación se fundamenta en la conclusión de profesionales. De acuerdo al petitorio del acta de acusación, si el caso se va a juicio se darán a conocer otras pericias y la declaración en la Cámara Gessel, que será determinante para una eventual condena o absolución, remarcó.

Igualmente, está el diagnóstico de la inspección física, capturas de pantalla de celulares, denuncias, informes forenses, notas policiales, actas de procedimientos, boletas de motel, etc., conforman un total de 25 pruebas documentales ofrecidas por el Ministerio Público para el juicio oral y público.

Asimismo, existen 14 testigos propuestos y los datos extraídos de la computadora de Édgar Chilavert, que, al igual que la Cámara Gesell, están como prueba anticipada al juicio y que aún no se dieron a conocer oficialmente.

Pericias

La defensa de Chilavert aseguró que las pericias a los celulares de la víctima y del presunto victimario exculpan al periodista, pues no se encontraron mensajes de texto entre Francisco y el comunicador. Concluyen que las fotocopias de los mensajes que acercó el padre del niño a la Fiscalía eran falsificadas o correspondían a chats con un perfil falso de Facebook.

Además, las ubicaciones de los teléfonos no coinciden con el lugar, día ni hora de los abusos, recalcó el abogado Osvaldo Sánchez. La fiscala Carina Sánchez aclaró que la acusación no se fundamenta en mensajes ni en los teléfonos, sino en la evaluación psicológica, socioambiental y la declaración en la Cámara Gessel, entre los demás elementos ofrecidos como pruebas.

La acusación del Ministerio Público también señala que en la computadora de Chilavert se encontró material pornográfico homosexual (no pornografía infantil). Si bien no es una prueba de que existió abuso, es indicio de que la conducta sexual del acusado se ajusta al relato de la víctima, sostuvo el abogado Camacho. Agregó que también hay fotografías de niños que pueden indicar una tendencia pedófila.

Todo esto es negado por el abogado Sánchez y su perito Jaime Castro. Igualmente, dicha pericia se dará a conocer oficialmente recién en el juicio oral.

Otro cuestionamiento de la querella es que Édgar Chilavert se opone a ser sometido la pericia psicológica y psiquiátrica, en tanto que el abogado del acusado sostiene que no es una negativa total, sino que prefieren que la evaluación se haga en pleno juicio oral y público.

El Art. 135 el Código Penal establece una pena de 4 a 15 años de prisión por el abuso sexual en niños cuando se trata de un hecho punible simple. Con el agravante de que el abuso fue en diversas ocasiones, como sostiene la acusación contra Chilavert, la pena es de 10 a 15 años (Inciso 2°, numeral 2). Otro agravante es el coito, ya que la ley contempla que, si existió, la pena mínima y máxima se unifica en 15 años de cárcel (Inciso 3°).

Prisión preventiva

Édgar Américo Chilavert está con prisión preventiva desde el 12 de octubre del 2018. Intentó obtener su libertad en al menos siete oportunidades entre revisiones, apelaciones y pedidos de levantamiento de auto de prisión. El Juzgado Penal de Garantías y el Tribunal de Sentencia lo han mantenido encarcelado y el principal argumento es el peligro de obstrucción, según coinciden los magistrados.

Es que Francisco sufrió una revictimización en su comunidad porque Chilavert desde la cárcel hablaba vía celular en medios radiales y aseguraba que todo era un montaje del papá y del intendente de Concepción. El niño fue identificado en toda su comunidad y sufría bullying en la escuela, en donde cursaba el 8vo grado, se detalla también en el informe socioambiental.

Además, el mismo abogado Sánchez confirmó que tienen un video de confesión de la víctima y que planean incluirlo en el juicio. Este y otros argumentos fundamentan el peligro de obstrucción a la investigación, explica el abogado Emilio Camacho.

*El nombre es ficticio. Tampoco se publican datos que faciliten la identificación de la víctima, de acuerdo a lo establecido en el Art. 29 del Código de la Niñez y la Adolescencia (Ley N° 1.680/01, modificada por la Ley N° 6.083/18).