Las autoridades del Hospital Nacional de Itauguá denunciaron este martes ante el Ministerio Público un hecho de supuesto abuso sexual, tras una consulta ginecológica de la víctima.
El sindicado de cometer el hecho sería el capellán del Hospital Nacional, Pedro Robadín, quien supuestamente abusó de una joven de 20 años con discapacidad, en la vivienda del padre de esta, a donde el religioso fue llevado para orar por ella. El hecho habría ocurrido dos semanas atrás. Sin embargo, este martes la joven llegó al centro asistencial para una consulta, donde constataron el abuso.
La presunta víctima se encuentra internada en el nosocomio con apoyo de psicólogas, debido al trauma con que experimenta a raíz del abuso.
La investigación se encuentra a cargo de la fiscal Blanca Rosa Aquino, de la Unidad Penal N° 2, quien se constituyó hasta el centro asistencial para recabar más datos. Familiares de la víctima temen que el hecho quede impune, y que la iglesia católica defienda a Robadín. Los capellanes son designados por la autoridad de la
“Niego rotundamente”, afirma Robadín
El religioso dijo estar sorprendido y desconcertado por la denuncia, ya que niega “rotundamente” la comisión de ningún tipo de abuso y menos a una persona con discapacidad. Dijo estar interesado en saber el origen de la acusación para poder defenderse y dijo estar a disposición de la Fiscalía.
Insistió bastante en conocer el nombre de la presunta víctima o de su padre para tratar de conocer el origen de la acusación. “Ningún abuso cometí y mucho menos a una persona con discapacidad. Desconozco absolutamente y niego”, dijo en reiteradas ocasiones negando los hechos que se le acusan.
“Voy a ver la forma de contactar con esa fiscala. No puedo dar un paso sin que esto quede bien en claro, porque me sorprende. No entiendo ni atrás ni adelante de donde viene la acusación. Estoy en paz”, refirió.
“Siempre luche contra todo tipo de abuso sexual, siempre denuncie dentro y fuera de la Iglesia”, afirmó a la vez de indicar que le parecen llamativo algunos elementos de la denuncia, como ser por ejemplo el lugar donde se produjo.
En su defensa argumentó: “siempre cuido mucho justamente eso. Atendiendo con las puertas abiertas o atendiendo en el pasillo” y dijo que sobre todo suele atender a personas en “terapia intensiva o voy a hacer bautismo de niños si están por morir”.
Antecedentes
En el 2018 Pedro Robadín fue expulsado de la Congregación del Santísimo Redentor. Además fue condenado a dos años y medio de cárcel al ser encontrado culpable por el tribunal de sentencia integrado por los jueces Víctor Alfieri, María Luz Martínez y Daniel Ferro, por los hechos punibles de denuncia falsa y simulación de un hecho punible.
Respecto a estos antecedentes, Robadín afirmó que la condena finalmente quedó anulada y que los magistrados fueron denunciados por prevaricato.