Bajante de río asusta: temen falta de combustible y encarecimientos

El río Paraguay sigue su tendencia crítica de decrecimiento. Su nivel hoy es de apenas 88 cm y los pronósticos indican que esto se extenderá al menos por el resto del mes y hay incertidumbre sobre qué ocurrirá en las próximas semanas. Esteban Dos Santos, presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFyM), sostuvo que de persistir la situación, nuestro país corre riesgo de desabastecimiento de combustibles. Además, como la navegabilidad se hace difícil, se complica la importación y exportación de productos, lo que puede suponer un encarecimiento de los mismos para el consumidor.

Alarma la bajante del río Paraguay.
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El río Paraguay creció este año de forma crítica y ahora está en una situación a la inversa. Los niveles son tan extremadamente bajos que afectan a la navegabilidad. Esto supone una gran afectación esencialmente para el comercio de Paraguay.

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Los niveles del río bajaron, en promedio, medio centímetro por día desde junio pasado, aunque la tendencia de las últimas jornadas es decreciente en 5 a 6 centímetros por día. En Asunción, por ejemplo, el nivel hasta este sábado es de 0,88 metros.

Frente a esto, Esteban Dos Santos, presidente del CAFyM, dijo a ABC TV que si es que continúa esta tendencia, podría haber un desabastecimiento de combustibles. Esto ocurriría si es que el gobierno no toma las medidas necesarias para paliar la situación, considerada normal en términos científicos, a estas alturas del año.

Mínimas anuales desde 2015 hasta 2019 al 31 de octubre. Ahora el nivel del río Paraguay bajó aún más en Asunción: 0,95 cm.

“Esto pone en riesgo, por ejemplo, la importación de combustibles. Como Paraguay es importador del 100% de su combustible, corremos el riesgo de desabastecimiento de aquí a algunas semanas si el río continúa bajando y no se interviene el río”, sostuvo Dos Santos.

El CAFyM pide un mayor dragado del río en ciertos puntos. El presidente de la entidad explicó, por ejemplo, que hay solo una máquina dragando en Pilar, que es uno de los puntos críticos para la navegación.

Los pasos críticos para la navegación están en Sajonia y en Pilar. También hay problemas en Ciudad del Este. Dos Santos contó que, por ejemplo, un cargamento de arroz para exportación tuvo que ser llevado vía terrestre a Pilar, lo que supuso un encarecimiento del traslado.

Es justamente este problema el que podría generar precios más caros de los productos que se importan a nuestro país. El decrecimiento del río redujo entre 40 y 50 % la capacidad de carga de los barcos, por lo que se tienen que hacer más viajes para poder transportarlos. Todo esto se traduce a una carga mayor para el consumidor final. “Si continúa esta situación y no se hace una intervención inmediata, es probable que se impida la navegación en absoluto”, indicó Dos Santos.

Si bien es difícil conocer qué realmente pasará, el presidente de los armadores sostuvo que si la tendencia continúa de esta manera, la navegabilidad será imposible en unas tres semanas.

“Nosotros venimos trabajando con el gobierno hace varias semanas y alertando sobre las medidas que se deben tomar en este momento. Lo que se debe realizar es un trabajo de dragado de emergencia. Las zonas de navegación de nuestras embarcaciones, que atienden el 80% del mercado exterior paraguayo, se dividen en tres: tenemos embarcaciones navegando sobre el río Paraguay al norte de Asunción, sobre el río Paraguay al sur de Asunción y el río Paraná en Ciudad del Este y las confluencias”, detalló Dos Santos.

A la espera de la lluvia

Nelson Pérez, subdirector de Hidrología de la Dinac, explicó que esta situación es normal y que se esperan las lluvias que generalmente caen desde mediados de noviembre y diciembre para aumentar el caudal de los ríos. “Estamos en periodo de estiaje, es decir, en período de bajante y no hay ninguna forzante para que esto se mantenga con aguas crecidas, porque tenemos niveles muy bajos en el Pantanal, que es donde nace el río Paraguay y no hay forzantes como la lluvia, que fue lo que ocurrió en los primeros meses del año”, sostuvo.

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Para Pérez, es difícil que se alcancen los niveles mínimos que se dieron en 1952. Ese año, el nivel del río Paraguay marcó -0,49 metros, es decir, por debajo del nivel del mar. “Es muy difícil que se llegue a eso porque estamos entrando en noviembre, en la quincena y principios de diciembre empieza el periodo de lluvias. También a finales de diciembre termina la bajante, el ciclo natural como se dice. A partir de enero empieza a subir naturalmente”, contó.

Tendencia seguirá

Julio Ayala, pronosticador de turno, informó este sábado en conversación con radio ABC Cardinal que la tendencia es que los ríos sigan bajando su nivel. “Lo que indica la perspectiva hidrológica es que (el río Paraguay) siga descendiendo por lo menos en estas primeras semanas. Para el 11 de noviembre están pronosticando 85 cm, con un nivel de más o menos 20 centímetros”, precisó.

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