Esta tarde la Comisión Bicameral de Presupuesto dio a conocer las determinaciones tomadas para el Presupuesto General de la Nación 2020. El documento contempla varias reasignaciones, entre ellas los G. 14.000 millones para el Ministerio del Interior; G. 5000 millones para el Ministerio de Salud; G. 18.853 millones para el Ministerio de Justicia y G. 22.935 millones, destinados a la Contraloría General de la República (CGR).
El Ministerio del Interior había recibido un recorte de 4,2 millones de dólares para la compra de chalecos y armas para la Policía Nacional. Esto había generado la crítica de los legisladores al señalar que se debería priorizar la seguridad puesto que es uno de los principales reclamos ciudadanos al gobierno de Mario Abdo. Ahora la reasignación alcanza los 2,2 millones, es decir, la mitad de lo que se iba a sacar en esa materia.
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En ese contexto, el titular de la Bicameral, Silvio “Beto” Ovelar señaló que las reasignaciones otorgadas a las instituciones del Estado en materia de presupuesto “demuestra que la clase política ha entendido cuál es la urgencia que hoy tiene el país”, indicó.
“El presupuesto presentado por Hacienda más adenda es de 13.500 millones de dólares, los pedidos de ampliación realizados por las diversas instituciones superaban los 700 millones de dólares. De haberse aprobado hubiésemos llegado a 17.200 millones de dólares; el monto es de imposible cumplimiento”, referenció.
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Recordó que el temor era que en el estudio los legisladores actuaran “con demasiada generosidad” y superaran con amplitud lo presentado por Hacienda. “Sin embargo, estoy sorprendido porque el monto aprobado está por debajo 10.000 millones de dólares lo presentado”, añadió.
Recordó que ahora el presupuesto pasa a la Cámara Baja. “Diputados va a tener la oportunidad de adecuarse a esta situación y a partir de la media sanción de Diputados posteriormente ya pasa al Senado en una segunda etapa, ojalá esos mismos resultados pudiéramos llegar al final de la ronda, una vez superado Diputados y llegado a senadores”, opinó.
No obstante, aclaró que hubo consideraciones especiales como de los guardiacárceles porque indicó que hoy mismo las penitenciarías son una bomba de tiempo. “Pero no pudimos cumplir con los pedidos del Ministerio Público y la Corte Suprema de Justicia”, subrayó.