En el comunicado, ACNUR manifiesta que, en virtud del principio de confidencialidad que se desprende tanto del derecho internacional de refugiados como de las legislaciones nacionales, le “resulta posible compartir o difundir información sobre ningún caso individual”. Por ese motivo, no realiza declaraciones sobre casos individuales.
Asimismo, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas recuerda que la concesión de asilo o el reconocimiento de la condición de refugiado “es una actividad de naturaleza pacífica, apolítica y exclusivamente humanitaria que no debería afectar las relaciones entre los Estados, ni generar cuestionamientos entre ellos”.
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Finalmente, aclara que la emisión de documentación de identidad y de viaje para las personas refugiadas, solicitantes de asilo y apátridas es una competencia exclusivamente ejercida por los Estados y que ACNUR no emite dicha documentación desde hace varios años.
En este comunicado no se menciona el caso Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán, pero guarda relación con el mismo, puesto que días atrás cobró notoriedad en toda América Latina que los acusados por secuestro en Paraguay consiguieron huir del Brasil hasta Uruguay, para luego refugiarse en Finlandia.
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Anuncio Martí y Juan Arrom poseen un salvoconducto de la ONU, pero el segundo emitido también por el gobierno de Finlandia. Estos datos se desprenden del Registro Migratorio Internacional, según consta en las imágenes publicadas.
Cuando se dio a conocer la huida de los compatriotas hacia Finlandia, el fiscal de Asuntos Internacionales, Manuel Doldán, había manifestado que “el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos fue el que, a nuestro criterio, propició toda esta orquestación, por así llamarlo”.
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