Como una repartija de culpas podría definirse la conferencia de prensa realizada la mañana de este miércoles en la Cancillería para comunicar oficialmente el contexto de los hechos que derivaron en la fuga de Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán a Finlandia, escapando una vez más de rendir cuentas a la Justicia paraguaya.
Según expresó Enrique Insfrán, ministro sustituto del canciller, el Gobierno paraguayo “condena el otorgamiento indebido del estatuto de refugiados en Uruguay (de Arrom, Martí y Colmán) y las facilidades otorgadas para asegurar su traslado a Finlandia a fin de evitarles responder ante la Justicia”.
En otro momento, recordó que estos tres hombres “son prófugos de la Justicia desde el 2003, procesados por secuestro extorsivo, asociación criminal, privación arbitraria de libertad y daño a la integridad física y moral”.
Insfrán sostuvo tajantemente que Paraguay “rechaza enérgicamente el tratamiento dispensado por el Gobierno de Finlandia a los prófugos y las gestiones que este país realiza ante el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para el otorgamiento de documentos que hicieron posible una vez más burlar a la Justicia”.
“Uso indebido del estatus”
Recordó que “el uso indebido del estatus de refugiados es digno de repudio” por parte de Paraguay y que hechos como estos “merman la confianza en la cooperación que debe primar en las relaciones bilaterales”.
“El sistema no debería ser utilizado para salvar a persecución de crímenes y que se haga justicia. Lamentamos la falta de cooperación de las autoridades uruguayas en la persecución del crimen transnacional, más aún luego de la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que dejó en claro que (Arrom, Martí y Colmán) no son perseguidos políticos ni víctimas de violaciones de sus derechos”, aseveró Enrique Insfrán.
Rememoró que, a través del Pacto de San José de Costa Rica, Uruguay también reconoce la competencia del CIDH. “Por ende, debería haber tenido en cuenta los hallazgos de dicho tribunal, que muestran fehacientemente que no hubo persecución política alguna”, argumentó el ministro sustituto de la Cancillería.
Criticó, asimismo, el levantamiento del Código Rojo por parte de la Interpol, pues, según dijo, “no se encuadra en la lógica ni la razón; actúan en desmedro de su credibilidad haciendo dudar de su capacidad de perseguir el crimen organizado”.
Un último esfuerzo
Recordaron también en conferencia de prensa que el servicio consular paraguayo tomó las medidas correspondientes una vez que los prófugos estuvieron en Madrid, España, para verificar documentación de los mismos y también se reiteró la orden de captura que pesaba sobre ellos. Alegaron que se hizo una comunicación exhaustiva de la situación procesal a las autoridades y se hizo un último esfuerzo para detenerlos en Madrid, pero no se logró, por no tener el Código Rojo vigente. Las autoridades paraguayas desconocen el motivo por el cual Interpol no ha vuelto a implementar el Código Rojo.
Insistió en repudiar al Alto Comisionado de la ONU, de quien dijo “se extralimitó en el ejercicio de su competencia”.
“La figura de Alto Comisionado de la ONU fue creada con el fin de otorgar protección a quienes están en peligro, entre ellos los perseguidos por causas políticas, no los procesados por crímenes”, lamentó.
Medidas a adoptar
A raíz de lo ocurrido, el ministro sustituto de Relaciones Exteriores comunicó cuáles serán las medidas a adoptar por nuestro país de ahora en adelante:
*Se convocará al embajador de Uruguay en Paraguay, Federico Perazza, para que brinde explicaciones sobre el actuar de su gobierno.
*Se llamará a consulta al embajador de Paraguay ante Uruguay, Rogelio Benítez.
*Se presentará la protesta diplomática respectiva ante Finlandia, sin perjuicio de gestionar la extradición de Arrom, Martí y Colmán, para eventualmente, traerlos al país a que enfrenten a la Justicia.
*Formalizar protestas ante el Alto Comisionado de la ONU para los refugiados y otros altos órganos internacionales pertinentes.
*Presentar protestas antes los órganos de la Unión Europea (UE) por el dispensamiento facilitado por Finlandia a los prófugos paraguayos.
La conferencia contó además con la presencia del ministro sustituto, Enrique Insfrán, del procurador general de la República, Sergio Coscia, y del fiscal de Asuntos Internacionales, Manuel Doldán, entre otras autoridades.