Se trata de los buques Isabelle I y Madeleine, que se encuentran retenidos por autoridades de la Prefectura Naval Argentina y de la Dirección de Aduanas argentina, el primero, desde el 22 de setiembre, y el otro, desde ayer.
Karina Ferreira denunció a nuestro medio que ambas embarcaciones pasaron las inspecciones de rutina; sin embargo, continúan varadas. Comentó que las autoridades les exigieron los documentos de las mercaderías, lo que no les compete, ya que los buques no tenían ni destino ni escala en puertos argentinos, sino que se dirigían a Uruguay.
Los abogados de la empresa propietaria de los navíos proporcionaron los documentos pertinentes y exigen la pronta liberación. Afirman que se está violando la libertad de navegación, que prescribe el artículo 4 del Acuerdo de Transporte Fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná, y la Libertad de tránsito, que dispone el artículo 9 del mismo instrumento jurídico regional.
“Esta situación no solo genera graves perjuicios económicos a nuestra empresa, sino también nefastos precedentes para la navegación y el comercio regional, más aún en estos tiempos de difícil situación económica para los países de la región”, denunció Ferreira.