El panel sobre Contrato de Rehabilitación y Mantenimiento (Crema) implementados en nuestro país por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) contó con una importante concurrencia de profesionales locales. Estuvieron también disertantes extranjeros, como la ingeniera Silvina Crivelero, de la Asociación Argentina de Carreteras, y el ingeniero Óscar Garrido, del Ministerio de Obras Públicas de Chile.
“Los profesionales volcaron sus experiencias en cuanto a la ejecución de este tipo de contratos (Crema), que tienen que ver con el mantenimiento de carreteras, tanto los resultados como los obstáculos. Esta modalidad estuvo relegada en nuestro país en el ámbito vial debido a que probablemente las políticas de Estado le dieron poca prioridad, no obstante, en los últimos tiempos hubo un avance importante en estos últimos tiempos”, señaló el ingeniero Hugo Florentín, presidente de la APC.
“Hoy en día un gran porcentaje de las inversiones en obras viales están destinados al mantenimiento por contratos. Es una nueva modalidad de mantener los caminos con empresas privadas que se encargan de rehabilitar los caminos, ponerlos a punto y a partir de allí mantenerlos por cinco años”, añadió Florentín.
El profesional indicó que de acuerdo a la experiencia de los países vecinos, se fueron ajustando los puntos necesarios para la implementación de la modalidad y hoy en día tienen el éxito esperado. Señaló que sufrió ajustes y se fue aplicando con el paso de los años.
“Uno de los obstáculos es la disparidad en las cantidades de materiales para ponerlo a punto con respecto a lo que realmente sucede después, porque para determinar las obras en la puesta a punto hay que evaluar el estado de la ruta en ese momento y generalmente esa evaluación se hace dos o tres años antes de que iniciar los trabajos, por lo que, cuando se van a iniciar las obras, la ruta ya está más deteriorada y requiere más cantidades, y eso no conviene ni a la contratista ni a la contratante”, indicó el profesional.
En cuanto a los beneficios de la modalidad Crema, Florentín, dijo que permite que se tenga un mantenimiento de ruta adecuado en un periodo de tiempo largo. “Anteriormente el Estado se hacía cargo de estos mantenimientos pero no se lograba por la cantidad de carreteras en deterioro. Con este tipo de contrato, la empresa que haga la puesta a punto, se esmera por hacerlo correctamente porque en caso contrario, va a repercutir en su presupuesto de los cinco años de mantenimiento”, indicó.
Por su parte, la ingeniera Silvina Crivelero, de la Asociación Argentina de Carreteras, destacó la importancia del seminario, y las características de este tipo de contrato. “En Argentina tenemos una experiencia con los contratos Crema, y uno de los puntos a tener en cuenta para mejorar el sistema es tener datos actualizados para todo lo que es el tránsito y la ruta, de esta forma se puede garantizar el éxito de todo el proceso”, dijo.