Una propiedad que pertenecía al extinto general Alfredo Stroessner fue invadida el pasado 24 de agosto y allí permanecen unas 300 familias, con una gran cantidad de niños.
El pequeño era hijo de Néstor González y de Elena López, domiciliados en el asentamiento 6 de Junio del barrio Don Bosco de Ciudad del Este. Sus padres lo llevaron al Hospital Los Ángeles, el sábado pasado, a causa de un cuadro de fiebre. Los médicos trataron de estabilizarlo, pero ya nada pudieron hacer. El forense Eduardo Cano diagnosticó como causa probable de muerte “deshidratación severa por cuadro febril”.