El 18 de agosto de 2018, dos guardaparques de la Reserva Tapytã, Rumildo Toledo (36 años) y Artemio Villalba (51), murieron tras un enfrentamiento con presuntos cazadores furtivos, un caso que cuenta con cinco imputados, de los cuales ninguno está detenido aún.
Villalba y Toledo se encontraban realizando un patrullaje cuando fueron atacados a tiros por los cazadores, cuyos disparos mataron inmediatamente a Toledo. Villalba falleció dos semanas después, internado en terapia intensiva.
A principios de setiembre, la Fiscalía imputó por el crimen a cinco sospechosos: Braulio Alcaraz González, Robert Alcaraz González, Arnaldo Ramón Alcaraz, Hugo Andrés González y Daniel González Britos.
Lea más: Cazadores furtivos habrían matado al guardabosque de la reserva Tapytã
Sin embargo, hasta la fecha no hay personas aprehendidas por el caso, actualmente a cargo del fiscal Carlos Mercado, el tercer agente del Ministerio Público asignado a la investigación.
La Fundación Moisés Bertoni, que administra la Reserva Tapytã, señaló en un comunicado que la impunidad en el caso “no es solo una afrenta a la Fundación, sino a todo el sistema de áreas protegidas en Paraguay, es el hecho en sí de querer proteger los recursos naturales”.
“(Rumildo y Artemio) estaban trabajando en la protección de una Reserva Natural Privada a perpetuidad, que es un patrimonio de todos los paraguayos y por qué no, del mundo”, dijo Yan Speranza, director de la Fundación Moisés Bertoni.