Cultura eco-friendly: tratamiento de residuos que inicia en el hogar

Un famoso proverbio indígena dice que “la tierra no es herencia de nuestros padres sino préstamo de nuestros hijos”. Pensando en esto tres amigas, Renate Díaz Gill, Mariela Solé y Cathy Kelly, iniciaron su microempresa de importación de composteras para la degradación de materia orgánica con el fin de convertirla en abono. La presentación del proyecto fue llevado a cabo en el stand de MIPYMES de la Unión Industrial Paraguaya (UIP).

Renate Diaz Gill, Cathy Kelly y Mariela Solé, son las creadoras de Panambí.
audima

La motivación de las empresarias surgió con la experiencia que tuvieron en una visita a Colombia, donde vieron que las residencias utilizan un sistema de procesamiento de residuos que incluye separación de artículos para reciclaje y el compostaje.

Consideraron que era necesario y urgente que en nuestro país se adopte una cultura similar para mejorar la calidad de vida no solo en la actualidad sino también pensando en las siguientes generaciones.

“Traemos estas composteras que básicamente degradan la materia orgánica y la convierten en abono”, contó Renate. Son tres modelos distintos los que están disponibles: dos de ellos para residencias y un tercero, de mayor volumen, que está pensado para empresas o instituciones.

Las composteras se preparan en un recipiente previamente testeado, debe ser colocado bajo techo y en el mismo se vierten los residuos orgánicos, cubrirlos con aserrín e ir acumulando la mezcla hasta aproximadamente un mes cuando el abono está listo para la cosecha.

El producto que se genera en la compostera puede ser utilizado en los jardines de las casas, se puede venderse a viveros, usarse en huertas hogareñas, etcétera.

Por su parte, Mariela contó que lo que las enfocó en este rubro es haber aprendido que entre el 50% y 60% de la basura que se genera en países en desarrollo es materia orgánica. “Si desde hace 20 años se hubiese implementado el compostaje en Paraguay, el 50% del vertedero de Cateura sería abono, y se hubiese podido utilizar en los espacios verdes públicos”, subrayó.

Las composteras serán importadas de Medellín, Colombia, y la primera tanda de las mismas estará implementada en nuestro país en dos meses.

“Lo más positivo de este sistema es que no necesitas ningún conocimiento previo, no necesitás ensuciarte, no tiene olor, no atrae moscas, nada”, manifestó.

A su vez, Cathy expresó que la implementación del compostaje rompe el preconcepto que se tiene sobre el procesamiento de la basura.

Para tener una compostadora en cada casa se hace una inversión de una vez y las empresarias son las encargadas de enseñar a los usuarios la forma de utilización. Para implementar el sistema se hará un servicio de arrendamiento con asistencia técnica.

La presentación del emprendimiento tuvo lugar en el pabellón de MIPYMES de la Unión Industrial Paraguaya (UIP) en la Expo, donde en una lista de interesados a la fecha se inscribieron más de 20 personas.

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