El ataque provocó daños en una iglesia, en varios edificios de viviendas, una tienda, un garaje, un conducto de gas y una treintena de coches, según informaron el Ministerio del Interior y las autoridades regionales.
Doscientos veinte edificios de vivienda y varias casas en las que viven 40.000 personas están sin calefacción debido a los daños sufridos por el conducto, que también ha dejado sin este tipo de servicio a varias escuelas y guarderías.
Rusia ataca prácticamente todas las noches territorio ucraniano con decenas de drones kamikaze iraníes Shahed que a menudo combina con misiles. Odesa ha sido una de las ciudades más castigadas del país por este tipo de ataques.