"Estamos bajo un Gobierno que insiste en optar por la fuerza y el abuso, en lugar de construir la paz, el bienestar del pueblo. La vuelta a la Constitución no es un capricho, es una obligación si queremos la paz", manifestó el opositor a través de X.
Asimismo, exigió que esta muerte "debe generar, como reacción inmediata (...), la libertad plena de todos los venezolanos privados de libertad" tras las presidenciales -cifrados en más de 2.400 por el Ejecutivo-, cuando se desataron protestas contra el resultado oficial de las elecciones, que dio una cuestionada victoria al mandatario Nicolás Maduro.
"Me uno al dolor de su madre y su familia. Esta muerte, injusta, cobarde, muestra el martirio de los hijos de esta patria frente al poder indolente", expresó Márquez.
Según informó María Corina Machado, líder del partido Vente Venezuela, al que pertenecía el fallecido, tras la detención de Martínez -quien "padecía diabetes tipo 2 y sufría un problema cardíaco"-, fue llevado a unos calabozos "infrahumanos", donde "fue fuertemente maltratado y estuvo en unas condiciones higiénicas tan precarias que tuvo necrosis en ambas piernas", por lo que fue solicitado su traslado a un hospital.
No obstante, prosiguió, "durante meses, le negaron cualquier atención médica, alegando que necesitaban permiso de sus superiores en Caracas" y, "finalmente, después de tanto tiempo y denuncias, fue trasladado" a un hospital, donde los facultativos, "al ver el estado en el que se encontraba Jesús, decidieron que debían amputarle ambas piernas", pero "en medio del procedimiento, esta mañana, falleció".
Hasta el momento, el Ejecutivo no se pronunció sobre el fallecimiento de Medina ni sobre las acusaciones de los opositores y organizaciones que denunciaron el caso.